Una vez que concluyan los primeros peritajes, la Procuraduría General de la República (PGR) atraerá por completo la investigación relacionada con la detonación de un artefacto explosivo ocurrido esta mañana frente al edificio del Palacio Municipal de Nuevo Laredo, Tamaulipas, hechos que dejaron como saldo siete lesionados.
Autoridades de la dependencia federal informaron que el personal de su delegación estatal trabaja coordinadamente con los peritos de la Procuraduría General de Justicia de la entidad para recabar los elementos de prueba necesarios.
La detonación se registró minutos antes de las 11:00 horas sobre la calle Héroe de Nacataz esquina con Benito Juárez, donde se ubica el estacionamiento exterior de la sede del gobierno municipal.
El explosivo se encontraba en el interior de una camioneta que quedó totalmente destrozada, mientras que al menso cuatro vehículos que se encontraban próximos al sitio resultaron calcinados., ventanales de edificios cercanos presentaron daños por la fuerza del estallido.
La PGR recibió un reporte de siete lesionados, todos ellos personas y policías que se encontraban cerca de la zona, pero no se reporta a ninguno de gravedad. También se descarta que haya resultado herido el alcalde Benjamín Galván.
Elementos del Ejército Mexicano establecieron de forma inmediata un perímetro de seguridad en torno a la zona del estallido.
El Secretario de Gobierno del estado, Morelos Canseco, indicó que la explosión derivo de una granada colocada en el interior del automóvil. En la PGR indicaron que se esperarán los peritajes para conocer la naturaleza del artefacto.
El móvil preliminar de estos hechos apunta hacia una agresión por parte de la delincuencia organizada. Cabe recordar que Nuevo Laredo es una zona de fuerte disputa entre los Zetas y el cartel del Golfo.
La averiguación previa que iniciará la PGR por estos hechos será por el delito de violaciones a la ley federal de armas de fuego y explosivos, delincuencia organizada, y lo que resulte.