El PAN tiene que pasar por un proceso de cambios que ni siquiera han comenzado, si es que quiere regresar al poder, señala Rafael Giménez, ex director de Opinión de la Presidencia. Al enfrentar elecciones sin el apoyo de gobiernos estatales y el federal el partido estará en serias dificultades, señala.

 

¿POR QUÉ EL PAN NO GANÓ?

 

El PAN estaba topado por tres problemas muy serios. Uno, el daño de la economía en el año de 2009, del que la población nunca acabó de recuperarse en el bolsillo de forma completa. Segundo tema, el de la violencia, si bien la mayoría de la población percibe necesario luchar contra el crimen organizado, la gente quería cambiar de estrategia. Y otra, el PAN estaba dividido en todas las instancias, desde los presidentes de la República, Fox y Calderón, las distintas corrientes del partido y a nivel local. Parte de esa división se debe a la corrupción, era ya notable en varios lugares en el PAN, esas fueron las cosas que castigaron al PAN e impedían pensar en crecer.

 

¿CUÁL ES EL NIVEL DE CORRUPCIÓN EN EL PAN?

 

Desde hace muchos años lo hemos visto. Historias como la del Estado de México en los últimos 10 años le provocan una catástrofe que hace que nunca recupere el nivel de votación que tuvo con Fox o con Calderón. Pero no es el único, ha habido casos referidos en Aguascalientes, en Monterrey con Adalberto Madero que fue muy criticado. El distintivo de la oferta política del PAN era justamente ser honesto, el poder sí complicó a algunas personas en el partido, y vimos fenómenos de corrupción que no habíamos visto en la historia del PAN.

 

¿CÓMO SON LOS PLEITOS DE GRUPO DENTRO DEL PAN?

 

Hay dos más grandecitas (el sector conservador y los calderonistas) y una mayoría que está esperando que las cosas mejoren. La división es profunda, que un ex presidente del PAN, el primero de todos los tiempos (Vicente Fox), llame a votar contra Josefina habla muy mal del PAN. Además, muchos de los liderazgos históricos no estaban en campaña. Incluso algunos que participaban en la campaña, no llegaron a eventos, ni a promover el voto.

 

¿QUÉ HIZO QUE LA CAMPAÑA NO LEVANTARA?

 

El evento que realmente marca y debilita el arranque de campaña de Josefina es el del Estadio Azul, ella iba bien hasta ahí y es una prueba más de las divisiones del PAN. Se salen grupos organizados que no les interesaba el evento. Denotó un estado de ánimo de la militancia que estaba en el Distrito Federal y en el Estado de México sobre todo, que son los que llenaron y vaciaron el Estadio Azul, y que sus resultados te lo dicen todo, una catástrofe en los dos estados. A partir de ahí ya no pudimos seguir el ritmo de crecimiento.

 

CALDERÓN ACABA DE CRITICAR LA CAMPAÑA POR NO OFRECER CONTINUIDAD…

 

El 75% de los mexicanos querían cambio. Es muy difícil eso, sobre todo cuando no hay relección directa como no la hay en México. Aquí es muy difícil pedir una continuidad completa porque en el propio PAN ganó una candidata que era retadora, no la continuidad completa como lo era Cordero y mucho más de eso, sacamos 25% de los que querían continuidad, y 75% de los votantes no querían continuidad. Obtuvimos los votos de continuidad desde el principio y no conseguimos muchos votos más.

 

¿CÓMO SE VIVIÓ EL AMBIENTE EN EL CUARTO DE GUERRA DE JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA EL DÍA DE LA ELECCIÓN?

 

Había gente que nos dedicábamos a esto de medir y tener todo muy puntual, y estábamos muy pesimistas. Pero dominó el buen ánimo hasta el final, casi todos teníamos la esperanza de que algo bueno pasara ese día, pero la información que teníamos era mala desde unas semanas previas. Era una información de que íbamos a una elección muy difícil para nosotros, que íbamos a un día muy duro para el PAN. Pero sabíamos a lo que íbamos.

 

¿JOSEFINA YA SABÍA QUE IBA A PERDER?

 

Sabía los escenarios por lo menos. No estaba ajena a la información que fluyó, a las encuestas de salida de cada día. Sabía que las cosas estaban difíciles. En la tarde-noche lo manejó con mucha templanza, como casi toda la campaña, ella fue una gran candidata en condiciones muy adversas.

 

¿SI EL PAN DIJO QUE LA ELECCIÓN NO FUE EQUITATIVA POR QUÉ NO IMPUGNAR COMO PROPONÍA EL PRD?

 

El PRD no nos puede pedir nada. Y menos después de su conducta hace seis años. No íbamos a defender a alguien que denigró y que mantuvo en una posición muy difícil a los mexicanos. Nosotros tenemos que documentar lo que nosotros captamos, no hacerle el juego a alguien que no ha manifestado la más mínima vocación democrática, que es López Obrador.

 

¿QUÉ TANTO DAÑO LE HICIERON LAS ENCUESTAS A LA ELECCIÓN?

 

Muchísimo. Estamos viendo la peor conducta política de los encuestadores, no de todos, de un grupo. Vimos una sobrestimación sistemática a favor del PRI, que además difundían más que todos los demás juntos, como lo hicieron Ulises Beltrán, Francisco Abundis, Jorge Buendía, Ricardo de la Peña y Roy Campos. Esos encuestadores sí tienen una responsabilidad importante de lo que pasó. La izquierda y el PAN tienen la misma molestia por eso, si no es penal, sí tiene que ser exhibido y discutido públicamente por qué sobrestimaron tantos puntos y sistemáticamente esta elección. Resultaron falsas sus afirmaciones. Era como otro mundo en el que vivían ellos.

 

¿FUE UN FACTOR DECISIVO EN LA ELECCIÓN?

 

Afectó muchísimo. La responsabilidad del PAN, del gobierno del PAN y de la campaña, es muy grande en su resultado. Pero las encuestas que más se difundieron sí que jugaron a favor de Peña, y era un error sistemático. No es fácil de probarlo, pero yo creo que sí fueron determinantes.

 

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