De acuerdo con especialistas y funcionarios del Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), las pensiones que recibirán los primeros trabajadores jubilados bajo el esquema de las Afores podrían decepcionar a los afiliados.
“Lo peor que le puede pasar al SAR en 10 o 12 años es la decepción, que la pensión que reciban los trabajadores al final de su periodo laboral sea insuficiente”, aseveró Guillermo Zamarripa, director de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef), respecto a los 15 años del SAR.
Durante la presentación del estudio “Contribuciones y Desafíos del Sistema de Ahorro para el Retiro 1997-2012”, el ex titular de la Unidad de Banca y Ahorro de la Secretaría de Hacienda, dijo que el escenario más grave sería la inconformidad de los afiliados con la reforma de pensiones llevada a cabo en 1997:
“Que digan ‘¿tanto trabajé para recibir esto?’”, expresó Zamarripa.
En 1997 se conformó el Sistema de Ahorro para el Retiro, en donde a través de las Afores, cada trabajador aporta mediante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), un porcentaje de su salario a un fondo que se le entregará al jubilarse.
Especialistas y funcionarios advierten que el porcentaje de este ahorro o pensión que será entregado a los jubilados no será suficiente para mantener el nivel de vida de esta población.
“La tasa de remplazo (pensión) es muy baja porque la contribución es baja. Durante la reforma que se realizó en 1997 se buscó que los trabajadores no tuvieran costos elevados por esta implementación, pero después de 15 años, vemos que esto ya no es tan conveniente”, advirtió Zamarripa.
El director de Fundef dijo que las aportaciones que hacen en otros países de América Latina superan por mucho a las que realizan los mexicanos.
Al respecto, Óscar Franco, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Amafore), explicó que las proyecciones que han realizado varios centros de estudios de pensiones y especialistas, apuntan a una tasa de remplazo de entre 30% y 60% del último salario del trabajador.
“Esto está por debajo de los estándares tradicionales a nivel global, cuyas tasas de remplazo son de alrededor de 70% y 75% del último salario del trabajador”, dijo Franco.
Al respecto, Carlos Noriega de Grupo de Economistas y Asociados (GEA), uno de los autores del estudio, mencionó que elevar la pensión es uno de los principales retos del SAR:
“Se debe de elevar la tasa de remplazo, es decir, el ingreso que recibe el trabajador en proporción a lo que ganaba para otorgar pensiones adecuadas. Para esto se debe de aumentar el monto de las aportaciones que los trabajadores realizan, así como aumentar la rentabilidad de estas contribuciones y elevar la densidad de cotización”, explicó el investigador.
Afores sin riesgo de flujos ilícitos
Al recordar a Óscar Franco el caso del banco HSBC y las acusaciones de lavado de dinero por la que fue multada esta institución la semana pasada, el directivo aseguró que por su naturaleza, las Afores están fuera de la posibilidad de que entren flujos ilícitos, incluso, mediante el ahorro voluntario.
“El SAR está sujeto a legislaciones en cuanto a prevención de actividades ilícitas marcadas por las autoridades hacendarias, es por ello que cada administradora emite informes periódicos en los que se reportan operaciones relevantes en caso de que se presenten”, puntualizó.