Las mexicanas Aída Román y Mariana Avitia hicieron el 2-3 dentro del torneo de tiro con arco de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, luego de enfrentarse en la semifinal. Con ligero viento y con sentimientos encontrados, ambas deportistas tuvieron que sufrir porque sólo una debía buscar la medalla de oro y la otra el bronce, así que las dos se pusieron de acuerdo para salir y simplemente buscar el triunfo a pesar de todo.
Por primera vez en la historia del tiro con arco dos mexicanas luchan por las medallas.
Mariana Avitia hace 10 en su primer disparo del segundo set, Aída un poco abajo y la tensión comienza a subir de tono. Terminan empatadas a 27 unidades.
El entrenador coreano Lee Wong no sabe qué hacer, si estar con Mariana o quedarse con Aída. El reglamento no permite quedarse con ambas y tiene que decidir y por la cercanía, sólo dos pasos, opta por Aída y la lleva a la final.
Más tarde, en la disputa por el oro entre Aída Román y la coreana Bo Bae Ki, el duelo se hace cada vez más espectacular. La asiática inicia con tres fechas de nueve y la mexicana con un 10, 9 y 6. En la tercera parte, Bo Bae hace un set perfecto, por otro seis y dos ochos de la mexicana, está ya definido y sólo es cuestión de que la coreana falle y que la mexicana se entregue con un 10.
Se empata la serie. Dos nueves de Ki Bo Bae (26) y tres de Aída Román (27) le permiten a la mexicana igualar a 5-5. Se van a la flecha de oro porque la coreana tiene un set perfecto y eso pesa al final. Así que la mejor que tire gana y ambas marcan ocho. Entonces entra el reglamento y la coreana se hace del oro, pues quedó más cerca del centro, y la mexicana se colgó la plata en un día histórico para el tiro con arco “azteca”.
Mala noche, buen día
La noche antes de la gran cita, la mexicana Aida Román tuvo problemas para dormir. Los nervios la despertaron en medio de la madrugada y la angustia de lo que podía suceder en sólo horas la intranquilizaba. En la víspera había visto perder a sus compañeros de la rama masculina del tiro con arco y le preocupaba sufrir el mismo destino, especialmente luego de haberlo sufrido en la prueba por equipos ante Japón.
“A mí no me cuesta trabajo dormir, aún si hay mucha presión. Pero anoche me desperté en medio de la noche, estaba preocupada porque Japón nos había hecho lucir muy mal. Estaba nerviosa”, confesó Román ayer, poco después de haber superado sus temores para conquistar la medalla de plata en el tiro con arco individual.
“Recuperé mi sueño y me desperté normal a las 5:30 de la mañana e hice como Rocky y subí las escaleras, y ya el resto es historia”, agregó la mexicana.
“Me siento muy orgullosa y contenta por lo que acabo de lograr”, dijo Avitia, que ganó su bronce apenas minutos antes de la final.
Con sólo 18 años, Avitia ya ha participado en dos Juegos Olímpicos, pero los últimos cuatro años tuvo que luchar contra momentos difíciles en su carrera en el tiro con arco.
“Tuve muchos bajones en diferentes eventos internacionales, pero tuve paciencia y pude batallar para lograr lo que hoy estoy celebrando”, dijo la futura estudiante de periodismo y oriunda de Monterrey.
Ahora Avitia dice que se tomará un descanso y no pronostica si en cuatro años estará en los Juegos de Río de Janeiro.
“Falta mucho para eso, ahora me voy para el colegio a estudiar comunicación social y a ser su colega”, bromeó con los periodistas. AP