La reforma política aprobada por el Congreso de la Unión permite pasar del “sufragio efectivo a la democracia efectiva”, señaló el presidente Felipe Calderón al decretar y promulgar la reforma política en Palacio Nacional.

 

De cara al presidente de la Junta Política del Senado, el senador Manlio Fabio Beltrones, el primer mandatario calificó de “profunda e íntegra” la reforma política, aun cuando hubo minutas modificadas de la propuesta original.

 

Luego de reconocer el trabajo legislativo que hubo para la aprobación, aseguró que esta reforma fortalece las instituciones y a la ciudadanía, al permitirles proponer iniciativas de ley, así como buscar candidaturas independientes para puestos de elección popular.

 

Además se evita la “indebida parálisis legislativa” a través de la llamada “iniciativa de trámite preferente” por la que el jefe del Ejecutivo podrá presentar dos nuevas iniciativas de cara al periodo ordinario de sesiones o agilizar dos pendientes de dictamen que considere urgentes y que no pueden ser Constitucionales, que tendrán que ser discutidas y votadas en un plazo máximo de 30 días naturales.

 

Acompañado por el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, Calderón Hinojosa anotó que este es un paso importante en la evolución del régimen democrático, participativo y plural que los mexicanos se han dado, aunque reconoció que  todavía “falta mucho por hacer”.

 

Ubicado en el salón de Tesorería, abundó que el perfeccionamiento de las instituciones democráticas es un ejercicio “siempre inacabado”, lo que no significa que sea imposible encontrar los instrumentos necesarios que permitan acercar la voluntad ciudadana a la representación ciudadana.

 

En el acto, el presidente Calderón puntualizó que para el fortalecimiento de la democracia se requiere del constante perfeccionamiento de los poderes y de las instituciones, con la intención de hacerlos más funcionales y útiles para la ciudadanía.

 

Ahí se encontraban los presidentes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juan Silva Meza; del Instituto Federal Electoral, Leonardo Valdés; del Senado, José González Morfín, y de algunos partidos políticos, quienes escucharon en voz del mandatario que con la reforma política la consulta popular se eleva a rango constitucional, abriendo la puerta a los ciudadanos para expresar su opinión a los grandes temas nacionales y así poder derivar en mandatos concretos para los poderes Ejecutivo, Legislativo y autoridades competentes.

 

Comentó que con esta reforma se amplía la fecha para concluir la revisión de la Cuenta Pública, fortaleciendo así la transparencia y rendición de cuentas; además de dar estabilidad y certidumbre a la institución presidencial, ya que ante la falta absoluta del presidente, por mandato constitucional el titular de Gobernación se encargará de forma provisional del despacho.

 

Asimismo, Calderón dijo que con esta reforma política se permite la rendición de protesta del presidente electo no sólo en la Cámara de Diputados, sino también ante las mesas directivas del Congreso de la Unión; “si aun así fuera imposible hacerlo, se hará ante el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.