Ginebra. El Alto Comisionado de Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR) alertó hoy sobre el aumento del peligro en la frontera de Siria con el norte de El Líbano en donde los refugiados de ese país son blanco de bombardeos provenientes del lado sirio.
“La situación de la seguridad de los refugiados en las zonas fronterizas del norte del Líbano se está deteriorando”, afirmó en rueda de prensa el portavoz del ACNUR, Adrian Edwards.
“En la zona de Wali Khalid, donde varios cientos de familias de refugiados sirios viven, son blanco de bombardeos desde el lado sirio de la frontera de dos a tres veces por semana”, señaló.
“A pesar de esta situación, muchas familias prefieren quedarse en las zonas fronterizas inseguras donde han encontrado refugio con familias de acogida a trasladarse a un refugio colectivo”, agregó.
En el norte de El Líbano se han registrado 37 mil 740 sirios, en tanto que mil 700 reciben asistencia mientras esperan el registro.
En la ciudad libanesa de Trípoli, el lunes se abrió una nueva oficina de inscripción en el Centro Rachid Karame. Esto permitirá registrar hasta 700 personas por día, detalló Edwards, sin embargo, estimó que el número de sirios es mucho mayor pero no han querido registrarse.
Edwards lamentó esta situación pues los refugiados que no se han inscrito con el ACNUR tienen mayor dificultad de recibir asistencia básica y servicios médicos.
EL ACNUR atribuyó que los refugiados son renuentes a registrarse porque “temen represalias” una vez que puedan regresar a sus hogares en Siria.
Edwards subrayó que los datos de los refugiados del ACNUR son “estrictamente confidenciales” y no los comparten con ningún gobierno ya que son utilizados únicamente para su protección y asistencia.
Además, el registro es fundamental para inscribir a los niños en las escuelas públicas del Líbano, que reanudan clases el próximo mes después de las vacaciones de verano.
El ACNUR cubrirá los gastos de escolaridad de los sirios desplazados. Antes de las vacaciones de verano unos mil 200 niños sirios estaban estudiando en las escuelas en el norte del Líbano, y se estima que de tres mil a cuatro mil niños más entrarán al sistema en septiembre tras el registro.
Al 13 de agosto, según el ACNUR, el número de refugiados sirios formalmente registrados y en proceso de hacerlo en los países vecinos era de 157 mil 577 (45 mil 998 en Jordania, 37 mil 740 en El Líbano, 14 mil 129 en Irak y 59 mil 710 en Turquía).
Mientras que el número de refugiados aumenta, ACNUR sigue recibiendo informes de que muchos sirios han tenido grandes dificultades para cruzar las fronteras de manera segura, debido a la violencia y por problemas en puntos de control donde son interrogados y los coches son registrados.
Según el ACNUR, el peligro en la frontera con Jordania es similar a la del Líbano, los refugiados han denunciado haber sido atacados con artillería y armas pequeñas durante su viaje a la frontera.
Hasta hoy el gobierno jordano ha registrado 45 mil 998 personas, pero estima que cerca de 150 mil refugiados sirios han llegado desde marzo de 2011 cuando comenzó la fuerte represión armada del gobierno de Bashar al-Assad contra manifestantes.