Una variante de la influenza H3N2 ya infectó a 230 personas en el este de Estados Unidos; autoridades sanitarias de ese país aseguran que no existe riesgo de pandemia y el virus no es mortal, sin embargo mantiene una alerta debido a que la cifra de enfermos se disparó 18 veces en comparación con la registrada el año pasado.
El Centro para la Atención y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) reportó desde julio pasado que ocho estados tienen casos de influenza H3N2v (se coloca una “v” para identificarlo como una variante del virus).
El estado de Indiana ocupa el primer lugar con 138 casos en 23 condados, le sigue Ohio con 72 enfermos, así como Wisconsin, Virginia Occidental, Pensilvania, Michigan e Illinois, donde apenas se registraron los primeros casos la semana pasada; en Hawaii también se detectó ya un caso.
Este virus es una variante del tipo A de la influenza y llegó a Estados Unidos en 2010, cuando se detectaron los primeros casos de cerdos enfermos. Un año después el virus se contagio a los humanos que estuvieron en contacto con los animales y como resultado 12 personas enfermaron.
Los síntomas son iguales a los de un resfriado común: garganta irritada, fiebre, tos, escurrimiento nasal, ojos llorosos y dolores musculares. El año pasado, ocho de los enfermos estuvieron hospitalizados pero todos se recuperaron.
Aún no se ha confirmado que este tipo de influenza H3N2v se transmita de humano a humano, aunque se han detectado casos donde pudo haber sucedido.
Después de los análisis, las oficinas de salud estatales se dieron cuenta de que la mayoría de los casos son de niños o adultos que estuvieron en contacto con cerdos durante las ferias que realizan los granjeros durante el verano.
Ante esta situación, la CDC pidió a la población evitar cualquier tipo de contacto con los cerdos enfermos (que presentan los mismos síntomas de la gripe). En caso de no poder evitarlo, recomendó el uso de cubrebocas, guantes y lavarse las manos después de haber tocado a los animales.
Todavía no existe vacuna contra este tipo de influenza, por lo que los niños menores de cinco años, los adultos mayores, las mujeres embarazadas y aquellos con enfermedades crónicas deben tener mayores precauciones debido a que son grupos vulnerables.
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