Luego del fracaso del llamado Registro Nacional Único de Telefonía (RENAUT), a través del cual se intentó que cada celular en el país fuera registrado por la persona que lo utilizaba, lo que supuestamente facilitaría las investigaciones en caso de un delito, especialistas preparan ahora un nuevo proyecto que podría ponerse en marcha el próximo año.
Se trata del llamado Registro Nacional de Telefonía Móvil, el cual, al igual que el extinto RENAUT, consistirá en una base de datos de los millones de teléfonos celulares en el país, pero a diferencia del primer registro, no estaría construido con los nombres de los usuarios sino con sus domicilios.
Según lo adelantado a 24 HORAS, para garantizar que la información proporcionada por las personas sea verídica y no invenciones como sucedió con el registro anterior, lo que contribuyó a su fracaso, ahora se usará el servicio de Telecomunicaciones de México (Telecomm) para domiciliar los aparatos y enviar un código de activación.
La inversión para la construcción de este registro sería de aproximadamente 250 millones de pesos y se buscaría que estuviera listo hacia finales de 2013.
El Consejo Ciudadano de Seguridad Pública y Procuración de Justicia es la cabeza de este nuevo proyecto. Dicho organismo ha sido pionero en el tema de los delitos relacionados con los teléfonos celulares.
Salir del anonimato
En entrevista, el presidente del Consejo, Luis Wertman, hizo hincapié en la importancia en que pueda consolidarse un registro que saque del anonimato el uso de los teléfonos, sobretodo si se toma en cuenta que el 90% de los aparatos móviles no está inscrito en un plan de renta mensual.
Y es que los teléfonos que no tienen ningún registro, aun y cuando no sean robados, facilitan a los delincuentes su utilización en casos de extorsión o secuestro.
Wertman indicó que para evitar que se proporcionen datos falsos, el nuevo Registro Nacional de Telefonía Móvil estaría soportado por el servicio telegráfico de Telecomm, a través del cual se enviarían al domicilio los códigos de activación de los teléfonos, con la dirección que previamente otorgue el usuario a la compañía telefónica.
Lo anterior garantiza que se de una dirección real, aunque no sea la propia, pues ahí se enviaría el código para que el teléfono funcione. Para los teléfonos que ya están en operación podría requerirse un código para renovar su activación, con un plazo límite para que fueran enviados los datos.
Se prevé que en los próximos meses el Consejo platique con las compañías telefónicas sobre la factibilidad del proyecto, con miras a que pudiera arrancar el segundo semestre del próximo año
Fracaso del RENAUT
Wertman explicó que el primero RENAUT fue concebido como un instrumento de gran utilidad para identificar cada teléfono celular, sin embargo, las fallas vinieron en la forma en la metodología para captar los datos, situación que lo volvió inútil antes de que pudiera ser completado.
“El registro resultó un fracaso debido a la falta de veracidad de la información que proporcionaron los usuario de teléfono celulares, pero la verdad es que tampoco se implementó una mecánica adecuada”, indicó.
Los problemas del RENAUT quedaron en evidencia, cuando en la base de datos aparecieron teléfonos celulares registrados a nombre de “Cantinflas”, “Pedro Infante”, “Barack Obama”, “Felipe Calderón”, e incluso “Rambo” o “Terminator”.
El 15 de junio la Secretaría de Gobernación destruyó de forma definitiva la base de datos que se había conformado.
Registro en 4 pasos
Paso 1
Comprar el teléfono celular, cuyo chip estará desactivado
Paso 2
Solicitar (por teléfono o internet) la activación a la compañía proporcionando un domicilio
Paso 3
Esperar a que, vía telégrafo, se envíe al domicilio el código de activación, en no más de tres días.
Paso 4
Ingresar el código al aparato con lo cual se habilitará la línea