Buenos Aires. El 66% de los argentinos rechaza la posibilidad de que se reforme la Constitución para habilitar un tercer mandato presidencial de Cristina Fernández, según los resultados de una encuesta publicada hoy por la prensa local.

 

De acuerdo al sondeo realizado por la consultora privada Poliarquía, publicado hoy por el diario La Nación, de Buenos Aires, incluso entre quienes apoyan la gestión de Fernández, un 39% no está de acuerdo con una eventual reforma constitucional.

 

Cristina Fernández, que gobierna Argentina desde 2007, accedió a un segundo mandato de cuatro años, iniciado en diciembre pasado, tras vencer en los comicios de octubre de 2011 con el 54 por ciento de los votos.

 

La Constitución argentina habilita la reelección presidencial por sólo un mandato adicional.

 

Desde febrero de 2011, políticos del oficialismo especulan con la posibilidad de una reforma constitucional para habilitar un tercer mandato, pero de momento no se ha presentado ningún proyecto en este sentido y la presidenta ha evitado pronunciarse públicamente sobre este asunto cuando recientemente fue consultada por la prensa.

 

Según el sondeo de Poliarquía, el rechazo a una eventual reforma constitucional es mayor (81%) en la capital argentina, gobernada por la fuerza opositora Propuesta Republicana (Pro), que lidera el alcalde de la ciudad, el conservador Mauricio Macri.

 

De acuerdo a la consultora, la imagen positiva de Cristina Fernández es de 51 puntos, sobre un total de cien, once puntos por debajo de la que tenia hace un año.

 

“Con esos números se podría pensar que la reforma no puede pasar. Pero la experiencia política reciente muestra que el kirchnerismo ha tenido la habilidad comunicacional de instalar temas que parecen imposibles y sacarlos adelante”, señaló Fabián Perechodnik, director de Poliarquía.

 

Según el sondeo, el apoyo a la gestión presidencial crece hasta los 57 puntos entre los jóvenes de entre 18 y 30 años, segmento que en un 35% está de acuerdo con una eventual reforma constitucional.

 

En este contexto, el oficialismo impulsa cambios en las normas electorales para habilitar a los menores de entre 16 y 18 años a que puedan ejercer el voto de manera optativa.

 

Esta iniciativa, que comenzará a ser analizada por comisiones parlamentarias esta semana, ha generado algunos rechazos por parte de sectores opositores, que afirman que el proyecto oficialista busca utilizar a los jóvenes con fines electoralistas.

 

El voto en este país suramericano es obligatorio para los argentinos mayores de 18 años y hasta los 70 años.

 

Argentina celebrará elecciones el próximo año, cuando se vote para renovar cargos en el Parlamento, mientras que los próximos comicios presidenciales deberán celebrarse en 2015.