Como parte de su estrategia para combatir al crimen organizado, el presidente de Guatemala, Otto Pérez, anunció la apertura de tres nuevas bases militares en sus fronteras.
Las bases se instalarán en los departamentos de San Marcos y Petén, oeste y norte del país respectivamente, fronterizos con México, la otra en Izabal, en el Caribe.
Cabe señalar que el gobierno guatemalteco enfrenta una disputa con el Cártel de Los Zetas, debido a que la incursión de dicha organización criminal en el país causa un promedio de 16 muertes diarias.
Los recintos castrenses estarán custodiados por agentes de la Policía Nacional Civil, de Migración y de Superintendencia de Administración Tributaria, con el objetivo de contrarrestar las acciones del narcotráfico, contrabando y tráfico de personas, explicó Pérez.
El mandatario guatemalteco dijo que la instalación de las bases militares fue posible por un aumento de alrededor de 50 millones de dólares en el presupuesto del Ejército.
Desde hace dos semanas, unos 200 marines apoyan a las fuerzas de seguridad en Guatemala, en un despliegue sin precedentes para combatir al narcotráfico en aguas del Pacífico. Agencias