Al menos tres salarios mínimos se requieren para comprar diariamente aquellos alimentos necesarios para una buena nutrición y que están considerados dentro de la canasta básica, sin embargo 27 millones de mexicanos obtiene menos de esa paga.

 

Un estudio realizado por investigadores en economía y nutrición de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) revela que tan sólo este año el salario mínimo diario en la zona A del país –el más alto y que aplica en el Distrito Federal, la zona metropolitana, entre otras entidades- es de 62 pesos con 33 centavos, mientras que el costo mínimo de la canasta básica es de 183.59 pesos.

 

Los académicos del Centro de Análisis Multidisciplinario (CAM) de la Facultad de Economía y del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición explicaron que los casi 184 pesos sólo servirían para comprar los productos de la Canasta Alimenticia Recomendable (CAR), sin tomar en cuenta los gastos de vivienda, salud, transporte o educación.

 

Sin embargo, si estos gastos se consideraran, una familia integrada por dos adultos y dos niños necesitaría 824 pesos con 25 centavos, es decir 206 pesos por cada uno de sus integrantes para subsistir.

 

El salario mínimo está establecido en la Ley Federal del Trabajo y el artículo 123 de la Constitución, donde se señala que debe ser suficiente para satisfacer las necesidades básicas, no sólo vivienda, también sociales, educativas y culturales, de una familia de 3.5 personas.

 

Datos del CAM y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señalan que hasta diciembre del 2011 había 47.8 millones de mexicanos que recibían un sueldo por su trabajo, pero 56% obtenía menos de tres salarios mínimos. Esto significa que 27 millones de mexicanos no tienen ingresos suficientes para adquirir los productos de la canasta básica.

 

Durante el sexenio del presidente Felipe Calderón se perdió 43% del poder adquisitivo de los mexicanos, debido principalmente al aumento en el precio de alimentos como el huevo, la tortilla, el pan, el frijol, la leche y el aceite, además del alza en la gasolina, según datos del CAM.

 

En 2006 se compraban 4.2 kilogramos de huevo con el sueldo diario de un trabajador, pero a partir de agosto de este año sólo se pueden adquirir 1.7 kilogramos. El incremento en el precio de este producto se agravó debido a la presencia del virus H7N3 en granjas de gallinas ponedoras ubicadas en dos municipios de los Altos de Jalisco hace más de un mes.

 

Asimismo, en seis años el alza de la tortilla ocasionó que los mexicanos dejaran de comprar 16 piezas de pan aproximadamente, tres kilogramos de frijol, 1.3 litros de leche y casi un litro de aceite.

 

En este sexenio el aumento de la canasta básica aumentó 125% (101.34 pesos), a diferencia del salario mínimo, que aumentó sólo 28% (13.66 pesos), desde 2006.

 

Para que los mexicanos recuperen el poder adquisitivo que perdieron en el sexenio tendría que parar el aumento de los precios de los productos básicos durante los próximos 47 años y mantenerse el incremento promedio al año del salario mínimo, que es de entre 4.0 y 5.0%, advierte el estudio de la UNAM.