George Abdallah Elters y Samer Yasser Safa, detenidos en Mérida el sábado pasado junto con Rafic Labboun, presunto integrante del grupo Hezbolá, habían llegado a vivir a la capital de Yucatán desde hace tres años.
Ambos hombres, de acuerdo con un informe elaborado por un analista de Northeast Intelligence Network, también son agentes del Hezbolá.
Ambos son ciudadanos de Belice cuya responsabilidad era obtener un pasaporte falso de ese país a Rafic Labboun, detenido el pasado fin de semana en un predio del fraccionamiento Francisco de Montejo, en Mérida, por agentes migratorios y entregado al gobierno de los Estados Unidos.
El documento falso que le consiguieron a Labboun estaba a nombre de Wilhem Dick y éste habría ingresado a Mérida, procedente de Chetumal, hace menos de seis meses.
Tras el operativo, George Abdallah Elters, de 40 años de edad, fue liberado junto con Justin Yaffer Safa, de 13 años; Jamma Yaffer, de 7años; Jussef Yasser Safa, de 4 años y Janinni Gab, de quien no se específico su edad.
De origen libanés
Todos ellos estaban internados de forma legal en el país. Sammer Yasser Safa estaba hasta ayer en calidad de presentado en la Estación Migratoria del Instituto Nacional de Migración, porque autoridades de México y Estados Unidos, investigan si también es miembro de Hezbolá.
El informe del especialista señala que esta persona podría estar relacionada con Wakif Safa, jefe de Seguridad de los dirigentes del primer círculo del Hezbolá.
Además Wakíf está casado con la hermana del líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah.
De acuerdo con los antecedentes de Rafic Labboun en Estados Unidos, forma parte de la Asociación de Bay Area de la Mezquita de San José California y estuvo preso dos años tres meses en una prisión federal, acusado de un fraude con tarjetas de crédito, con el cual presuntamente envió recursos a Líbano para esa organización terrorista.
Labboun salió de la cárcel bajo libertad condicional y, por la ley estadounidense, tras pasar tres años de prueba en libertad, debía devolver el dinero.