JARTUM. Las autoridades sudanesas anunciaron que han incrementado las medidas de seguridad para proteger las misiones diplomáticas en el país, dos días después de que grupos de manifestantes atacaran varias embajadas en Jartum dejando un saldo de tres muertos.
El portavoz del Ministerio sudanés de Exteriores, Al Obeid Merauah, destacó el compromiso de su Gobierno en garantizar la seguridad de las legaciones que se encuentran en su territorio.
Merauah explicó que Sudán puede proteger las delegaciones diplomáticas ubicadas en Jartum y que “no necesita ayuda de nadie para cumplir ese deber de Estado”.
“Nuestra evaluación de la situación en Sudán muestra que las legaciones no corren peligro”, dijo Merauah, quien criticó los disturbios del pasado viernes.
El Gobierno sudanés rechazó una petición oficial de EU para la entrada de infantes de Marina para reforzar la protección de la embajada estadunidense en Jartum, de la que ha sido evacuado el personal no esencial.
El pasado viernes, cientos de personas protestaron ante las embajadas de EU, Alemania y Reino Unido en Jartum y lograron irrumpir en estas dos últimas, en unos disturbios que causaron la muerte de al menos tres sudaneses.
Tras los recientes ataques contra las legaciones de EU en Sudán, Libia, Egipto, Túnez y Yemen, la red terrorista Al Qaeda instó a los musulmanes a continuar con sus protestas para expulsar a los embajadores estadounidenses de sus países.
Respecto al contagio que han sufrido las manifestaciones en Europa y Oceanía, el ministro francés del Interior, Manuel Valls, criticó la manifestación en contra Estados Unidos que tuvo lugar el sábado en el centro de París. La intervención de la policía arrojó un centenar de arrestos. Valls fue enérgico al decir que no permitirá este tipo de manifestaciones.
Insistió en que no permitirá que en las calles se pueda oír a “gente que grita eslóganes hostiles a países aliados de nuestros valores” y tampoco a “mujeres cubiertas por entero con velo”, en alusión a quienes se concentraron ayer, sin solicitar permiso, en los alrededores de la embajada de EU y se pusieron a rezar, en protesta por un vídeo que consideran blasfemo hacia los musulmanes.
Por otra parte, la policía australiana acusó por alteración del orden público y asalto contra la policía a seis de los detenidos el sábado en Sídney durante los disturbios que siguieron a la protesta contra por el vídeo del profeta Mahoma.
Los manifestantes respondieron con el lanzamiento de objetos y levantando barricadas al uso de gases lacrimógenos y perros por parte de la policía en su intento por bloquear la marcha, lo que causó varios heridos graves que tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos. (EFE)