Sin precisar las inversiones que deberán realizarse ni los plazos para que las distintas acciones se cumplan, los países adscritos a la Organización de Estados Americanos (OEA) firmaron ayer los llamados “Compromisos de Chapultepec”, donde se sientan las bases de la constitución y operación de la Estrategia hemisférica para el Combate a la Delincuencia Organizada Trasnacional.


El evento, en el que se formalizó el pacto, se llevó a cabo ayer en el Alcázar de Chapultepec, encabezado por el presidente Felipe Calderón, así como fiscales y representantes de distintos países del continente. Destacó la ausencia del titular de la OEA, José Miguel Insulza, pese a que estaba contemplado en el programa.


El documento firmado establece que la estrategia estará sustentada en dos pilares, uno de ellos “operativo”, a través de la creación del denominado Centro Coordinador de las Américas (CCA), el cual contará con “autonomía técnica, operativa y financiera”, y cuya sede se ubicará en la Ciudad de México.

 

Será a través de dicho centro donde se concentrarán los esfuerzos operativos a nivel continental, para la implementación de estrategias en tiempo real contra las bandas criminales, el intercambio de información, el análisis de inteligencia, uso de técnicas de investigación y tecnologías innovadoras, diagnósticos delictivos y georeferenciación del delito, entre otros.

 

No obstante, el mismo documento precisa que la adhesión al CCA será “voluntaria”, es decir, no están obligados los países de la OEA a participar en el mismo.

 

Sobre los recursos para su puesta en marcha, aclara que las “aportaciones serán voluntarias o en especie”, mientras que su financiamiento definitivo deberá definirse en los estatus que se diseñen posteriormente.

 

Narcodólares al CCA

En el evento, el presidente Calderón dijo que México aprovechará los recursos asegurados al narcotráfico para la puesta en marcha del CCA, pero reconoció que esperan de las participaciones de los otros países que lo integrarán, sin precisar ninguna cifra.

Tampoco se establece una fecha precisa para la puesta en marcha del CCA y sólo se refiere que el Consejo Directivo que lo encabezará deberá reunirse a más tardar en 90 días, luego de la firma de los “Compromisos de Chapultepec”.

El otro pilar de la estrategia es político y recaerá directamente en la OEA, a través de la creación de una Comisión Interamericana contra la Delincuencia Organizada Transnacional, en el que se “recomienda” que participen todos los países adscritos.

La función de la Comisión será el estudio y diseño de instrumentos jurídicos y planes de colaboración, el estudio de estrategias de prevención y una mejor asistencia a las víctimas, entre otros.


La procuradora, Marisela Morales, calificó como un “logro” la firma de este acuerdo, sobretodo porque su elaboración se alcanzó en un lapso de tan solo cinco meses, cuando se trata de compromisos que en algunos casos se extienden por “años”. 
(Con información de Diego López)