DENVER. Mitt Romney, candidato republicano, aprovechó la coyuntura económica de EU para atacar a su rival, el presidente Obama. Su tema en el que él es experto, el económico, resultó ser el más vulnerable para el presidente Obama durante su gobierno. La economía, y en particular la creación de empleo, se convirtieron en los principales temas del primer debate celebrado en la Universidad de Denver, Colorado.

 

Obama optó por iniciar el debate tratando de tocar las fibras patrióticas de los televidentes al afirmar que pondrá en marcha un “nuevo patriotismo económico” para crear empleos y “reconstruir” el país con inversiones en educación y energía.

 

“Queda mucho trabajo por hacer, no se trata de dónde estamos, sino de hacia dónde vamos”, subrayó Obama.

 

Sobre la deteriorada clase media, el candidato demócrata lanzó una frase motivadora: “Nos va mejor a todos cuando le va mejor a la clase media”, anotó. Sin embargo fue poco convincente frente a las cifras presentadas por el republicano.

 

Romney, por su parte, aseguróque no recortará los impuestos a los ricos si gana las elecciones y dijo que abrirá nuevas vías comerciales, “sobre todo con Latinoamérica”, perseguirá el equilibrio presupuestario y luchará por las pequeñas empresas.

 

“Mi plan no es recortar impuestos porque aumentaría el déficit”, argumentó Romney ante las críticas de Obama a sus propuestas y agregó que pretende simplificar las leyes fiscales para que se creen empleos y reducir el número de personas que necesitan de la caridad para acceder a alimentos.

 

Por minutos, el debate se convirtió en una guerra de cifras y de tecnicismos entre los dos “combatientes”, situación que se convirtió en aburrida para una parte importante de la audiencia.

 

Uno de los momentos en el que Romney logró ganar contundencia (por su naturaleza comparativa) fue cuando dijo que no quiere “ir por el camino de España”, ya que gran parte del presupuesto lo destina a pagar la deuda.

 

De igual manera, Romney prometió que, si llega a la Casa Blanca, eliminará y reemplazará la famosa ley Dodd-Frank, diseñada para aumentar el control de las operaciones financieras de riesgo tras la crisis de Wall Street en 2008.

 

“Necesitamos regulaciones en Wall Street, pero no como las propuso Obama”, respondió el candidato republicano al ser preguntado por el moderador, Jim Lehrer, por su parecer sobre la regulación. Obama, de manera inmediata señaló que la ley era necesaria debido al comportamiento irregular de algunas instituciones que otorgaron hipotecas a personas que no cumplían con los requisitos.

 

Respecto al tema sanitario, Mitt Romney, dijo que su costo en el país es “prohibitivo” y aseguró que, de llegar a la Casa Blanca, revocará la reforma sanitaria conocida como Obamacare.

 

Obama replicó que revocar la reforma sanitaria aprobada en 2010 amenazaría con dejar a 50 millones de personas sin cobertura médica.

 

El primer debate no respondió a la naturaleza de los enfrentamientos entre candidatos: ser un espectáculo. La noticia es que Obama sí tiene rival.