Beirut. Con aviones y artillería, el gobierno sirio atacó el viernes el bastión de los rebeldes en la ciudad de Homs en lo que constituyó el más intenso bombardeo en meses, dijeron activistas.
Los ataques con tanques, morteros y aviones se produjeron en momentos en que el gobierno luchaba simultáneamente en otro frente, la acosada ciudad norteña de Alepo.
La intensificación de los ataques del gobierno a las ciudades sirias sugiere que el régimen de Damasco no se ha distraído con las crecientes tensiones con su vecino del norte, Turquía. El parlamento de Ankara autorizó el jueves operaciones militares trasfronterizas, un día después que un cañoneo sirio mató a cinco civiles en territorio turco.
El activista Mohamed Saeed, residente en el suburbio de Douma, en Damasco, dijo que los rebeldes capturaron una base de defensa aérea en el sector oriental de Ghouta cerca de la capital.
Un video mostró a decenas de combatientes en un área desde donde se elevaban columnas de humo. Uno de ellos dijo que “un batallón de defensa aérea misilística” fue capturado. Otro video mostró misiles dentro de un cuarto.
Saeed dijo que los rebeldes tomaron la base el lunes, pero los videos fueron difundidos el jueves. Los rebeldes no suministraron otras pruebas que confirmasen la captura de la base ni identificaron el lugar que muestra el video. De confirmarse, la captura de los misiles antiaéreos daría impulso a una fuerza ligeramente armada que enfrenta frecuentes ataques por aire.
Homs ha sido uno de los focos centrales durante el levantamiento de 18 meses contra el régimen de Bashar Assad. La lucha se ha extendido a otras áreas en los últimos meses, incluso Alepo, desde que se redujo una ofensiva del gobierno contra blancos rebeldes en Homs en abril.
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Londres, dijo el viernes que el ataque a Homs es el más intenso en cinco meses. El grupo, que recaba información de una red de activistas en el lugar de los hechos, dijo que el bombardeo tuvo como blanco el vecindario de Jaldiya.
“En la madrugada, el régimen enloqueció y empezó a cañonear histéricamente”, dijo un activista en Homs, Abu Rami, a The Associated Press via Skype el viernes. “Está cayendo un promedio de cinco cohetes por minuto”. Abu Rami habló desde el cuartel central rebelde conocido como Antiguo Homs. Pidió ser identificado por su sobrenombre por temor a represalias del gobierno.
Agregó que las fuerzas del gobierno atacaban con cohetes y morteros los vecindarios en manos de los rebeldes en Antiguo Homs, Qusour y Jouret el-Shayah. Abu Rami agregó que las fuerzas del gobierno han cañoneado pueblos en torno de Homs y el pueblo de Rastan, en manos de los rebeldes.