MOSCÚ. La policía detuvo a varios opositores en el centro de Moscú durante el acto de protesta “Jubilemos al abuelo” convocado contra el presidente ruso, Vladímir Putin, que celebró ayer su 60 cumpleaños, informó el periódico digital Gazeta.ru.
Según el influyente diario digital, en el parque Ilinski de la capital la policía procedió a la detención de blogueros y algunos periodistas que habían preparado “regalos” el jefe de Estado, que según la legislación rusa alcanzó la edad oficial de jubilación.
Algunos detenidos ni llegaron a la concentración cuando los policías comprobaron los presentes que le habían preparado al presidente.
Un hombre fue detenido en el metro con una tarta, otro con una cuerda y jabón para preparar la soga para la horca, y otro con un rastrillo, escribe la publicación.
El organizador de la curiosa celebración, Vadim Korovin, pretendía “regalar” al presidente un uniforme carcelario.
Mientras tanto Vladímir Putin, celebró su cumpleaños en su casa familiar de San Petersburgo rodeado de los suyos, mientras algunos movimientos juveniles pro-Kremlin conmemoraron la fecha con distintos actos en las calles del país.
El presidente ruso, Vladímir Putin, consideró justa la sentencia que condena a dos años de prisión a tres integrantes del grupo punk Pussy Riot en una entrevista emitida hoy por el canal de televisión NTV, que coincidió con el 60 cumpleaños del jefe de Estado.
“En realidad está bien que fueron arrestadas y está bien la decisión que ha tomado el tribunal. Ya que no se puede hacer tambalear las bases de la moral, destruir el país. ¿Qué nos quedará entonces?”, dijo el presidente ruso.
Putin, que había declinado en numerosas ocasiones comentar la sentencia que llevó a las jóvenes a la cárcel por “gamberrismo motivado por odio religioso”, aseguró que al principio pensó que el caso no pasaría a mayores, pero luego constató que la cosa “llegó a juicio, y el tribunal les metió dos años”.
“Yo no tengo nada que ver. Ellas han obtenido lo que querían”, aseveró el líder ruso.
El presentador del programa en el que se emitió la entrevista recordó que las tres condenadas -Nadezhda Tolokónnikova, Yekaterina Samutsévich y María Aliójina- han señalado que su acción no estaba dirigida contra los creyentes ni pretendía ofender sus sentimientos, sino contra el propio Putin y el patriarca de la Iglesia Ortodoxa.
“El peritaje sostiene que todo lo relativo al presidente fue superpuesto a la grabación y que en realidad no gritaron nada al respecto en el templo”, sorprendió Putin. EFE