A través de su delegación regional en Sinaloa, la Procuraduría General de la República (PGR) inició una averiguación previa relacionada con el operativo del Ejército Mexicano en el que murió José Manuel Torres Félix, El M-1, considerado uno de los principales operadores del Cártel de Sinaloa.
Autoridades de la dependencia indicaron que el armamento y la droga asegurada durante la acción castrense del pasado 12 de octubre en la población de El Oso Viejo, que derivó en la muerte del líder criminal, quedará a disposición del Ministerio Público de la Federación.
Peritos de la PGR ya colaboran, además, con el personal de la Procuraduría General de Justicia del estado en los análisis periciales correspondientes. El cuerpo de Torres Félix permanece ene l Servicio Médico Forense de Culiacán y bajo resguardo militar.
La PGR ofrecía una recompensa de tres millones de pesos por información que facilitara la captura de Torres Félix, quien contaba con órdenes de localización y captura por cargos de delincuencia organizada, de acuerdo con lo establecido en el acuerdo a/2012/11 publicado el 27 de septiembre del 2011 en el Diario Oficial de la Federación.
Las investigaciones indican que El M-1, bajo las órdenes de Ismael El Mayo Zambada, controlaba el trasiego de drogas vía marítima en la costa del pacífico, operando principalmente en Chiapas y Oaxaca.
Pero además, la PGR lo identifica como uno de los principales sicarios de Zambada y responsable de ordenar el homicidio de miembros de cárteles rivales y de servidores públicos, aunque el número de casos no lo precisaron las autoridades consultadas.
La Procuraduría presume que la captura de Torres Félix, quien había sucedido a su hermano como hombre de confianza de El Mayo, podría debilitar el círculo cercano del capo, el cual según versiones extraoficiales tiene diferencias con Joaquín El Chapo Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa.
El M-1 o el Ondeado fue identificado en enero del año pasado por la Secretaría de Marina y la PGR como el principal líder de los Emes, grupo creado por Zambada García y que operan como escoltas para el trasiego, sicariato y acciones de control en las plazas para el Cártel de Sinaloa.
Tras la captura de su hermano Javier Torres Félix, El JT, quien en ese momento era el hombre de mayor confianza de Ismael Zambada, ocurrida el 27 de enero de 2004, Manuel que ya ocupaba el cargo de mando en la estructura de los Emes, avanzó.
Así, en menos de tres años, El Mayo Zambada realizaba operaciones con la flota marítima, para trasladar drogas en compartimientos adaptados. Cubrían rutas a puertos de Colombia para traer la mercancía e introducirla por puertos sinaloenses.
Es conocido porque a sus víctimas no sólo las asesinaba con lanzagranadas y bazucas, sino también con cuchillo.
Su hijo Atanasio Torres Acosta, Tachito o El 4, fue asesinado el 4 de abril de 2008, 14 días antes del anunció de la ruptura de Los Beltrán Leyva con la gente de Ismael Zambada García y Joaquín Guzmán Loera.
Los Emes también están en alianza con otro grupo de sicarios del Cártel del Pacífico, denominados Los Antrax, por lo cual se espera que en Sinaloa, los que están a cargo de Gonzalo Insunza, El Macho Prieto o MP, son los que podrían reaccionar para vengar el homicidio del hermano de Javier Torres Félix, El JT.
Ante el reacomodo que esperan dentro de ese grupo de El Mayo y la violencia que puede desatar el homicidio de el Ondeado, ayer las autoridades estatales de Sinaloa anunciaron que habrán de reforzar la seguridad en esa entidad, a fin de evitar una escalada de violencia que pueda desatarse por venganzas o reacomodos.
Hasta el cierre de esta edición, autoridades mantenían custodiadas las instalaciones el Servicio Médico Forense de Culiacán, a fin de evitar cualquier robo del cadáver de Manuel Torres Félix.