BOGOTÁ. Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) aceptaron hoy avanzar en un tratado para regularizar la guerra, en caso de que los diálogos de paz iniciados el jueves pasado terminen sin acuerdo.

 

Sin embargo, esta mañana al menos cinco militares murieron y otros tres quedaron heridos durante un ataque de las FARC contra una patrulla del Ejercito en la frontera con Ecuador, informó hoy una fuente oficial.

 

Respecto a sus intenciones de llegar a un acuerdo por la paz, en una carta que envió este sábado al colectivo Colombianos y Colombianas por la Paz, el líder del grupo insurgente, Rodrigo Londoño “Timockenko”, admitió la necesidad de humanizar el conflicto interno para proteger a la población civil.

 

“De nuestra parte planteamos que, en caso de no ser posible alcanzar el fin de la confrontación en esta oportunidad, avancemos hacia la construcción de un tratado de regularización de la guerra”, ofreció el jefe guerrillero en la misiva.

 

Consideró necesario que en ese tratado se aborde “el empleo bilateral de explosivos y de operaciones de bombardeo indiscriminado en zonas densamente pobladas”, así como un tratamiento “digno” a los guerrilleros en prisión.

 

En opinión de “Timockenko”, debe existir una comisión encabezada por organismos internacionales escogidos de mutuo acuerdo entre las partes para la verificación del proceso y de los acuerdos que salgan del mismo.

 

“Eso, en consideración a que en Colombia existe una guerra civil, desproporcionada en medios y combatientes, degradada por parte del

 

Estado, en la que nuestros prisioneros de guerra ni siquiera son reconocidos como tales”, escribió.

 

El movimiento civil había hecho un llamado al gobierno del presidente Juan Manuel Santos y a las FARC a bajar la intensidad del conflicto mientras avanzan las negociaciones que buscan poner fin a la confrontación armada interna.

 

Las partes acordaron negociar la paz de manera ininterrumpida y sin un cese al fuego previo, con Cuba y Noruega como garantes y Venezuela y Chile como acompañantes.

 

El líder de las FARC señaló que observan “con interés también la propuesta de cese bilateral al fuego y hostilidades, y manifestamos nuestra disposición a discutir con el gobierno nacional las condiciones en que podría darse”.

 

Esa guerrilla ya había planteado al gobierno la necesidad de negociar con un alto el fuego, pero el Ejecutivo dejó en claro que solo se suspenderán las acciones militares, cuando se llegue a un acuerdo definitivo en la mesa de diálogo.