QUITO. La Procuradora General de México, Marisela Morales Ibáñez, abogó por equiparar leyes y normas nacionales para judicializar delitos en uno u otro país, para una más eficaz estrategia hemisférica de combate al crimen organizado transnacional.
“Los controles tienen que homogeneizarse entre todos los países para que no haya unos que sean lugares en donde puede entrar todo tipo de sustancias y de ahí se busquen rutas para llegar a otros países”, dijo, al reflexionar sobre las drogas sintéticas.
“Es un tema que, precisamente por eso, requiere de controles y estrategias regionales para que los esfuerzos de un país no se vean afectados por las vulnerabilidades de otro”, añadió.
Morales Ibáñez estuvo en Quito la semana que termina para suscribir dos acuerdos de cooperación con la Fiscalía General de Ecuador, cuyo titular es Galo Chiriboga.
“Las fortalezas de unos países se tienen que compartir con otros para que todos podamos avanzar como hemisferio”, adecuando, por supuesto, los instrumentos a los sistemas de justicia y seguridad de cada nación, afirmó.
“La frontera no debe ser un obstáculo para llevar a prisión a los criminales” y en esa línea es “muy importante la comunicación y colaboración”, añadió.
Morales Ibáñez apuntó que ahora hay una “globalización del crimen”, las organizaciones criminales empiezan a dispersarse y a operar en varios países y por ello es importante hacer “un frente común para buscar soluciones a problemas comunes”.
La Procuradora mexicana citó además el caso de la trata de personas, donde, dijo, “también necesitamos esfuerzos regionales” porque ese delito se comete en un país y surte sus efectos en otro”.
En esas circunstancias, indicó, son necesarios instrumentos para judicializar los casos, de modo que las evidencias, declaraciones y demás documentos que se puedan intercambiar, sean válidos ante los jueces y de esa manera tener éxito en uno u otro país.
Agregó que inclusive se debería llegar hasta “ver cuál es el mejor país” para que los criminales paguen una condena y, en el caso de las víctimas, saber el mejor lugar para que estén protegidas.
En América, según Morales Ibáñez, hay que trabajar mucho en apuntalar las fortalezas de las instituciones de las naciones, pero también en sus debilidades, para enfrentar juntos la criminalidad.
Según la Procuradora mexicana, en el continente ha aumentado el problema de la violencia y el crimen organizado en sus diferentes manifestaciones y por ello es importante la unión de esfuerzos, porque las acciones aisladas no son suficientes.
En esa línea resaltó el papel que cumplirá el recién creado Centro Coordinador de las Américas, con sede en México, por mandato de la VI Cumbre de las Américas, y la propuesta ecuatoriana de una Corte Penal de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Una de las tareas del Centro será revisar y actualizar los instrumentos con los que cuentan los países a fin de que respondan a las necesidades de las naciones miembros, afirmó.