TEQUISQUIAPAN. La caravana de madres recorrió las vías del  tres y colocaron sobre ellas rosas de papel. En su llegada a Querétaro lamentaron la falta de un censo que cuantifique las desapariciones de migrantes.

 

Pese el sufrimiento, el llanto, la desesperación y la angustia de miles de familias en Centroamérica y México, no existe ningún censo o bando de información, sobre las personas que atraviesan la República Mexicana.

 

Aunque Martín Martínez, responsable de la Estancia del Migrante en Tequisquiapan, cuantificó en más de 500 mil los migrantes que este año han pasado por la zona y destacó  que la migración se incrementó en la última década.

 

“Llevamos el conteo por las bolsas de comida que preparamos, por los alimentos, por eso nos damos cuenta”, afirmó.

 

Además insistieron en la exigencia de una fiscalía especializada y un instituto estatal para migrantes.

 

Mujeres que ya localizaron a sus familiares se mantienen en la lucha. Emeteria Martínez, originaria de Honduras, señaló que gracias a este trabajo localizó a su hija, el 6 de noviembre de 2010, tras 21 años de su desaparición.