MADRID. El líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo hoy que no ha pensado en ningún momento en presentar su dimisión tras los malos resultados de su partido en las elecciones regionales celebradas el pasado domingo en Galicia y el País Vasco.

 

El secretario general socialista aseguró que va a cumplir “hasta el final” con su tarea al frente de su partido.

 

Rubalcaba compareció hoy ante la prensa tres días después de los malos resultados electorales obtenidos en Galicia y el País Vasco, durante los cuáles mantuvo silencio a pesar de que algunas voces de su partido le responsabilizaron del fracaso y pidieron una reflexión profunda sobre sus causas.

 

El líder socialista señaló que sus compañeros le eligieron hace ocho meses para abanderar un proyecto con el que recuperar la confianza de los ciudadanos, que el partido había perdido “claramente” en las últimas elecciones generales, cuando se hizo con el poder en España el conservador Partido Popular por mayoría absoluta.

 

“Esa es la tarea que voy a cumplir hasta el final. No he pensado en dimitir”, recalcó Rubalcaba, antes de señalar que eso no es óbice para no hacer una profunda reflexión sobre lo que ha ocurrido en las elecciones gallegas y vascas del pasado domingo.

 

También aseguró que “absolutamente nadie” le ha planteado que dimita, ni en su despacho, ni por teléfono, ni siquiera mediante un “tuit”.

 

Preguntado si se considera como un candidato adecuado para optar de nuevo a la presidencia del Gobierno español y sobre el momento en que el PSOE debe decidir ese candidato, el líder socialista se limitó a señalar que “cuando toque se hará”.

 

Rubalcaba elogió la gestión del “lehendakari” (presidente regional vasco), el socialista Patxi López, que el domingo perdió las elecciones frente al Partido Nacionalista Vasco (PNV).

 

El secretario general del PSOE lamentó que López no haya recogido en las urnas el logro de que ETA haya abandonado la violencia -algo que anunció hace un año la banda terrorista- pero recalcó que “ha merecido la pena” que los socialistas hayan gobernado en el País Vasco.

 

Respecto a la región de Galicia (noroeste), donde el Partido Popular revalidó su mandato y aumentó su mayoría absoluta, Rubalcaba reconoció que los ciudadanos gallegos no percibieron que hubiera una alternativa de gobierno.