El embajador de Azerbaiyán en México, Ilgar Mukhtarov, pidió hoy respeto para el líder nacional de su país, el expresidente ya fallecido Heydar Aliyev, después de que una estatua en su honor, ubicada en la capital mexicana, desatara numerosas críticas.

 

Durante una rueda de prensa en la sede diplomática de Azerbaiyán, el embajador señaló a la diáspora armenia en México como la causante del “ruido” creado en torno a la instalación de este monumento en honor a Aliyev y otro en recuerdo a la matanza de Jodyalí en 1992.

 

“Somos conscientes de la campaña mediática impulsada por el Gobierno de Armenia y su diáspora local en un intento de desacreditar el trabajo, la vida y la dedicación del líder nacional de Azerbaiyán, Heydar Aliyev”, afirmó Mukhtarov.

 

Aliyev, un exagente de la agencia de investigación soviética KGB que impulsó el establecimiento de las relaciones entre Azerbaiyán en México, fue para muchos un tirano que, tras 30 años en el poder, fue sucedido por su hijo.

 

El diplomático admitió estar “muy sorprendido” por la reacción ante un proyecto inaugurado en agosto pasado, que ya se conocía previamente y para cuya ejecución se “consultó y colaboró” con todas las autoridades federales y locales competentes.

 

Además del monumento al expresidente, la embajada de Azerbaiyán construyó otro, también con el permiso del Gobierno local, en recuerdo a una matanza de azerbaiyanos atribuida a los armenios, con una placa que alude al “genocidio de Jodyalí”, una definición rechazada por Armenia y aún en cuestión en la comunidad internacional.

 

El responsable de la embajada, entidad que costeó no solo las esculturas, sino también la remodelación de las áreas circundantes por valor de 65 millones de pesos (unos 5 millones de dólares), dijo que ambos proyectos “se realizaron de buena fe y con profundo agradecimiento al hermano pueblo de México”.

 

La remodelación incluye la donación de tres campanas para la capilla de la Santísima Concepción de la Plaza Tlaxcoaque, en el centro histórico, que serán presentadas hoy, sin que esté previsto que acuda ningún representante del Gobierno capitalino.

 

Las críticas obligaron al Gobierno local a crear una comisión para valorar, analizar y emitir recomendaciones sobre las esculturas.

 

Tras quedar constituida el pasado martes, se prevé que la comisión entreviste a críticos y defensores y revise los convenios y acuerdos de la instalación de ambos monumentos.

 

En este sentido, Mukhtarov confió en que el asunto se resuelva “de la mejora manera posible”, sin tener que implicar a las cancillerías de ambos países, con una recomendación de la comisión “apropiada”, dentro del marco de la “legalidad” y el “respeto al convenio”.

 

Resaltó la “relevancia” de la figura de Heydar Aliyev, quien, aseguró, “es muy respetado” en su pueblo “como un gran protector y defensor” de los intereses nacionales y de la calidad de vida de los azerbaiyanos en todas partes y sugirió a quienes le critican que busquen “fuentes de información más fidedignas”.

 

El diplomático estuvo acompañado por su homólogo turco, Ali Ahmet Acet, quien manifestó su “apoyo” a Azerbaiyán y resaltó los lazos de amistad que unen a ambos países.

 

Asimismo, defendió la figura de Aliyev y afirmó que “no es sano insultar la memoria de uno de los líderes de Azerbaiyán”, a quien -dijo- también se le tiene en “buena estima” en Turquía.