Pilotos, mecánicos, ingenieros, trabajadores administrativos y todos los demás servidores públicos adscritos a la Dirección General de Servicios Aéreos (DGSA), de la Procuraduría General de la República (PGR), se encuentran bajo investigación, ante las sospechas de posibles actos de corrupción.

 

Ayer, un equipo de más de 200 Policías Federales Ministeriales, agentes del Ministerio Público y peritos, intervinieron las oficinas y hangares de la DGSA ubicados en la Ciudad de México, Guadalajara y Cuernavaca, en el marco de una diligencia coordinada que se extendió por más de seis horas.

 

Versiones a las que tuvo acceso este diario indican que el caso está relacionado con situaciones de robo de piezas y refacciones, la compra de partes de aeronaves en mal estado, desvío de recursos, violaciones de protocolos de operación y mantenimiento, entre otros.

 

Autoridades de la PGR indicaron que se recabaron declaraciones de diversos trabajadores y se catearon las instalaciones, se verificaron inventarios de refacciones y otros bienes materiales, y se recopilaron diversos documentos.

 

Lo anterior, en el marco de una investigación ministerial a cargo de la Subprocuraduría Especializada de investigación de Delitos Federales y de la Visitaduría General, que podría traer consigo sanciones tanto administrativas como penales.

 

Se indicó, además, que se trata de un trabajo instruido por la titular de la PGR, Marisela Morales, que derivará en un reordenamiento de toda el área.

 

Previo a estos operativos, la PGR llevó a cabo una auditoría interna en la DGSA, que arrojó diversas anomalías, entre ellas un faltante de al menso 500 piezas, así como la existencia inexplicable de otras refacciones que no corresponden a ninguna de las aeronaves de la institución.

 

En septiembre trascendió que una empresa estadunidense, de nombre JDA Aviation Techonoly Solutions, realizó una auditoria en la DGSA, la cual evidenció diversas anomalías y el mal estado de las aeronaves de la institución.

 

Incluso, se detectó un intento de adquirir un motor de una aeronave por un monto de aproximadamente tres millones de dólares, pero el cual no era compatible con ninguna de las naves de la Procuraduría.

 

Los problemas en la referida dirección se remontan desde hace varios años. En 2004, trabajadores del área informaron a los órganos de control interno de la institución, sobre supuestos actos de corrupción.

 

A principios de sexenio, la PGR vio menguada la dimensión de su flota aérea, la cual pasó de poco más de 150 aeronaves a las 80 con la que cuenta actualmente, varias de ellas en dudosas condiciones.

 

En la PGR indicaron que los resultados de las investigaciones que se están llevando a cabo, y las sanciones en contra de los funcionarios que resulten responsables, se darán a conocer antes de que concluya el año.

 

La DGSA es la responsable, entre otras cosas, del traslado de los funcionarios de la institución y de otros funcionarios del Gobierno Federal, así como de personas detenidas.

 

En la década pasada, la flota aérea de la PGR era utilizada en el marco de operaciones contra el trasiego y cultivo de drogas, pero en los últimos años su participación fue disminuyendo, ya que la titularidad de dichas tareas pasó a manos de las fuerzas armadas y de la Policía Federal,

 

De acuerdo con la página de Internet de la PGR, el titular de la Dirección General de Servicios Aéreos, es Manuel Jesús González Flores, la Jefa del Departamento de Gestión de partes Aéreas es Edith Otamendi Santillán, y el Director de seguridad Aérea es Pedro Hector Malagón Rivero. Todos están bajo investigación.

 

Destaca que cargos como el de la Dirección de Administración y Finanzas, y el de Jefe de Departamento de Adquisiciones, se encuentran vacantes.

FLOTA AEREA PGR

 

*80 aeronaves aproximadamente

*40 en condiciones de vuelo regular

*5 en condiciones de vuelo óptimo

*15 requieren mantenimiento

*20 inservibles