Grupo Televisa dijo que está dispuesta a participar en una inversión de 800 millones de dólares en su empresa conjunta de telefonía móvil, si México cambia las reglas de telecomunicaciones para ayudar a las compañías más pequeñas a competir con Carlos Slim.
Grupo Iusacell, la empresa conjunta de Televisa y el multimillonario Ricardo Salinas, podrían requerir el capital adicional en los próximos tres años para expandir su cuota de mercado, dijo el vicepresidente ejecutivo de Televisa, Alfonso de Angoitia. El dinero podría provenir de deuda o de una contribución equitativa de capital de ambos socios, señaló en una conferencia telefónica.
Aunque la base de suscriptores de Iusacell ha crecido 35% en el último año a alrededor de 6% del mercado, la empresa necesita que México endurezca su control sobre Slim para alcanzar su meta de una cuota de mercado de 15% a 20%, dijo De Angoitia. América Móvil, la compañía de Slim, tiene alrededor de 70% de los clientes de telefonía móvil de México.
“Sólo haremos la inversión de 800 millones de dólares si vemos que la compañía tiene un mejor desempeño y que hay posibilidades de que la regulación sea enmendada”, agregó De Angoitia. “Creemos que es necesario que las regulaciones sean modificadas porque tiene mucho sentido para el país”.
Televisa, la mayor televisora de habla hispana del mundo, adquirió su participación en Iusacell a principios de este año por mil 600 millones de dólares. Ese dinero se utilizó para pagar deuda y expandir la red de Iusacell, con sede en la Ciudad de México.
Las nuevas reglas deberían incluir regulación asimétrica, declaró De Angoitia. Eso significaría que los reguladores podrían establecer reglas que sólo aplicarían a América Móvil, por ser el operador dominante. Las reglas deben debilitar la ventaja que América Móvil tiene porque puede ofrecer a los clientes tarifas más baratas para hacer llamadas dentro de su red, lo que hace que los clientes tenga más posibilidades de elegir su servicio en lugar de otros, porque es el mayor, señaló De Angoitia.
Los reguladores también deben eliminar los acuerdos exclusivos a los que América Móvil llega para vender los equipos más nuevos, concluyó De Angoitia.