Lance Armstrong, la gran potencia del mundo del ciclismo, el atleta que fue creando a lo largo de su carrea un imperio que gozó, ha perdido su lugar en la historia, y lo peor, fue él mismo quien lo derribó, a base de trampas y ahora está ante las ruinas de sus propios actos.

 

El ciclista, quien logró ganar la batalla contra el cáncer con metástasis en cerebro y pulmones, hecho que confirmó su condición de superhombre y volvió de él algo único en el mundo; declaró en alguna ocasión que sólo temía a la derrota, y ahora, así son las cosas, la mira de frente y a los ojos. También dijo que ve la vida como una competencia continua, sólo que ahora la carrera es contra él mismo.

 

“Lance era (de hecho, es todavía para muchos) símbolo de supervivencia, de sobreponerse a todo, de utilizar cada batalla deportiva como metáfora de una humanidad que se niega a ser vencida, que cree, que confía en su potencial, que grita en son de victoria contra la muerte (o, en su caso, el cáncer)” escribió Alberto Lati en su espacio en este diario.

 

El ex ciclista estadunidense, siete veces ganador del Tour de Francia, está en medio de la polémica, luego de que la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA, por sus siglas en inglés) confirmara que durante años usó sustancias ilegales de manera sistemática para potenciar su desempeño deportivo de 1999 a 2005.

 

En un principio el deportista negó las acusaciones de la USADA, incluso interpuso una demanda contra la agencia en el tribunal federal de su país, ya que consideró que proceso iniciado contra él violaba su derecho a un juicio justo y porque la agencia, estimó, no tenía jurisdicción en su caso.

 

Vio venganza en su caso

 

Armstrong aseguró el nuevo de julio que Travis Tygart, director ejecutivo de la USADA, perseguía vengarse de él y por eso alentó el proceso con el que al final, se logró despojar al ciclista de sus siete brillosos títulos del Tour de Francia, mismo que ahora se han empañado. Aunque guardó el silencio y se reservó mayores declaraciones.

 

Según la demanda de Armstrong, las normas y el arbitraje de la USADA están diseñados para encontrar a los deportistas culpables, sin dar la suficiente protección a la defensa.

 

La acusación contra el heptacampeón también alcanzó a algunos de sus asociados, entre quienes se encuentran los médicos españoles Pedro Celaya Lezema y Luis García del Moral, así como el entrenador Pepe Martí, el asistente médico italiano Michele Ferrari y el director deportivo belga Johan Bruyneel.

 

 

Caen los primeros

 

Fue un día después cuando cayeron las primeras carreras, la USADA suspendió de por vida a tres colaboradores de los equipos con los que Lance Armstrong ganó el Tour de Francia.

 

El español Luis García del Moral era un médico del equipo; Michele Ferrari fue un asesor médico; y José “Pepe” Martí era un preparador físico. Todos trabajaron con el equipo U.S. Postal Service y fueron acusados por la agencia estadounidense de participar en un amplio programa de dopaje en esos equipos.

 

Aunque ninguno vive en Estados Unidos, la USADA dijo que la prohibición les impide participar en cualquier deporte que se encuentre bajo el código de la Agencia Mundial Antidopaje.

 

“Los demandados optaron por no desperdiciar recursos al seguir adelante con el proceso de arbitraje, que sólo pondría de manifiesto lo que ellos ya saben que es la verdad sobre sus actividades de dopaje”, dijo Travis Tygart, director ejecutivo de la USADA.

 

 

Armstrong, un “ejemplo desmoralizante”

 

El pasado 24 de agosto el superhombre se convirtió en un “ejemplo desmoralizante” y vio el ocaso de su carrera, la cual, antes de este escándalo, estaba en la cúspide de la gloria deportiva.

 

Ese día la agencia antidopaje de Estados Unidos determinó suspender de por vida al ciclista, así como retirarle sus siete títulos del Tour de Francia, la competencia más importante del mundo del ciclismo, equiparable al mundial de futbol o los juegos olímpicos.

 

Una noche antes, Armstrong retiró cualquier nueva impugnación a las afirmaciones de la USADA, de que había consumido sustancias que aumentaban el rendimiento para ganar la máxima competición del ciclismo de 1999 a 2005.

 

Travis Tygart, presidente de la agencia, describió el caso de Armstrong como un ejemplo “desmoralizante” por la idea de ganar a toda costa en el ámbito deportivo.

 

 

Armstrong, un “sofisticado dopaje”

 

El pasado 11 de octubre la USADA informó que el ex ciclista Lance Armstrong, participó en un sofisticado y profesionalizado programa de dopaje.

 

En un adelanto del informe final de su investigación en el que dará a conocer los argumentos y los hechos que la llevaron a suspender a Armstrong de por vida, Travis Tygart, afirmó que Armstrong y el equipo US Postal Service, con el que ganó siete veces el Tour de Francia entre 1999 y 2005, utilizaban “el más sofisticado sistema de dopaje”.

 

El informe contiene más de mil páginas y su información proviene de 26 testimonios contra Lance Armstrong y el equipo dirigido por Johan Bruyneel, actual director del RadioShack.

 

En un comunicado, la USADA habló de “las evidencias que demuestran más allá de toda duda que el US Postal Service Pro Cycling Team controló el más sofisticado, profesionalizado y exitoso programa de dopaje que jamás ha visto el deporte”.

 

Por su parte el abogado de Armstrong, Tim Herman, volvió a la carga y acusó a la USADA de actuar como “fiscal, juez, jurado, verdugo y tribunal de apelación” a la hora de dar a conocer una investigación “parcial, con la versión de un solo lado y no probados los hechos”.

 

 

Renuncia a Livestrong

 

El estadounidense es un deportista que fascinó y fascina a millones de personas en el mundo. Su autobiografía It’s Not About the Bike (No es sobre la bicicleta) fue un “bestseller” internacional.

 

El hecho de superar un cáncer con metástasis en cerebro y pulmones lo volvió único y más enigmático, y también lo llevó a crear su fundación Livestrong, encargada de la lucha contra el cáncer, misma de la que se tuvo que separar tras el escándalo de dopaje.

 

Hace más de dos semanas, el 17 de octubre, Armstrong decidió renunciar como presidente de su organización, esto con la intención de limitar los daños que causaría en ésta la agitación por el dopaje que ha echado por tierra la trayectoria del ex campeón de ciclismo.

 

“No quiero que por la presencia de mi persona se ponga en un segundo plano los verdaderos objetivos que tiene nuestra fundación y que no son otros que seguir ayudando a todos las personas que sufren de cáncer”, manifestó Armstrong en su comunicado de renuncia.

 

Livestrong fue fundada en 1997 y ha recaudado casi 500 millones de dólares para apoyar a los pacientes de cáncer. Sin embargo Armstrong seguirá siendo miembro de la junta directiva de la organización.

 

Su trabajo al frente de la junta quedará en manos del vicepresidente Jeff Garvey, quien fue el presidente fundador en 1997.

 

 

Nike lo deja caer

 

Unos minutos después del anuncio de Armstrong, Nike informó que pondría fin a su relación comercial con el ciclista, “debido a las evidencias, al parecer incontrovertibles, de que… participó en actos de dopaje”.

 

La marca deportiva señaló que Armstrong engañó a la empresa durante más de una década. Aun así, el fabricante de ropa y calzado deportivo afirmó que seguiría apoyando a Livestrong.

 

“Nike no condona el consumo de drogas ilegales para mejorar el desempeño en modo alguno”, señaló la compañía en un comunicado.

 

 

“He pasado momentos mejores”

 

He pasado momentos mejores, pero también peores”, aseguró Armstrong, sobreviviente del cáncer, en un mensaje al público el viernes 19 de octubre, desde Texas, su ciudad natal.

 

Armstrong usó una camiseta negra en vez de la amarilla característica de su organización de beneficencia, que aludía al color de las casacas entregadas a los ganadores del Tour, la carrera más importante del calendario ciclístico internacional.

 

Lo dejan sin su “lugar en el ciclismo”…

 

El 22 de octubre la Unión Internacional de Ciclismo (UIC) anunció que el ciclista estadunidense Lance Amstrong ha perdido sus siete títulos ganados en el Tour de Francia y se le prohibió participar en competencias de ciclismo internacional.

 

“Lance Amstrong no tine lugar en el ciclismo”, dijo el presidente de UIC, Pat McQuaid, en rueda de prensa en Ginebra.

 

La decisión avala y va en línea con el informe de la Agencia de Antidopaje de Estados Unidos (USADA) en el que asegura haber encontrado evidencia “abrumadora” de que la exitosa carrera del ciclista era consecuencia de un sofisticado programa de dopaje.

 

“El mensaje para el ciclismo es que hay futuro, así queremos que lo vean los ciclistas y los patrocinadores”, abundó.

 

Y añadió: “No es la primera vez que llegamos a un punto difícil (…) el objetivo principal será evitar una situación similar en el futuro”.

 

Asimismo confirmó que no habrá apelación ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) por lo que se reconoce la sanción impuesta por la USADA.

 

 

… Y le piden que regrese el dinero

 

La Unión Ciclista Internacional (UCI) decidió apenas este viernes que el ciclista estadounidense tendrá que devolver los cerca de 2.9 millones de euros ganados en las competencias de 1999 a 2005 por doparse y suministrar sustancias dopantes a sus compañeros de equipo.

 

Fue el mismo organismo quien confirmó que no concederá a los segundos clasificados los siete Tours de Francia que le fueron arrebatados a Armstrong.

 

“El Comité decidió aplicar esta decisión a partir de ahora para cualquier resultado deportivo competitivo descalificado a causa de doping para el periodo entre 1999 y 2005″, reza el comunicado de prensa distribuido por la UCI.

 

 (Fotos: EFE)

El fracaso lo rodea todo

 

Las memorias Armstrong son una serie de historias de éxito, de seguridad en sí mismo: “sé que polarizo”, reconoció una vez. “Simplemente no le gusto a algunas personas”, aceptó en una suerte de sincera arrogancia.

 

Su lema es: “El dolor es temporal, la rendición aguanta hasta la eternidad”, y ahora tiene otra prueba en el camino para comprobarlo.

 

Armstrong fue suspendido de por vida y ya no se podrá hablar más del ciclista más exitoso de la historia, sino de uno de los mayores escándalos del deporte.

 

Tal vez esto deje der nota, pero algo es seguro: ayudará a recordar que siempre, en cualquier circunstancia, recorriendo toda la escala de niveles, el fracaso le llega a intempestivamente, y no así se va.