México renovará su línea de crédito flexible por 72 mil millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI) antes de que Enrique Peña Nieto asuma la Presidencia el 1 de diciembre.

 

“Es muy probable de que antes del inicio de la próxima administración sea renovada la línea de crédito”, anticipó Agustín Carstens, gobernador de Banco de México (Banxico).

 

Durante la presentación del Reporte sobre el Sistema Financiero, el gobernador del banco central señaló que las autoridades mexicanas van muy avanzadas en la negociación de ese mecanismo financiero, que puede usarse para enfrentar cualquier choque de una crisis económica.

 

Carstens reiteró que las crisis en la Unión Europea y el desorden fiscal Estados Unidos representan focos rojos y amarillos que afectarán a la economía mexicana y a su sistema financiero.

 

“Sigue habiendo focos rojos y en otros casos amarrillos que sí tienen el potencial de afectar a la economía nacional y también a nuestro sistema financiero”, puntualizó.

 

Actualmente, en el mundo se registra una mezcla de problemas de orden fiscal y financiero, los cuales han interactuado entre sí y crean un círculo vicioso que provoca un alza de las presiones fiscales tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea, añadió.

 

El funcionario explicó que el entorno de la economía a escala mundial entró en una etapa de deterioro a partir de abril de 2012.

 

“El crecimiento económico, la creación de empleo y la fragilidad del sistema financiero todavía no han tenido un punto de inflexión. Entonces, sí es un tema de preocupación el hecho de que la crisis en Europa continúe, cuando menos en el corto plazo, sin mostrar un anclaje fuerte para que haya solución en el futuro”.

 

Entre tanto, no quiso referirse nuevamente a sus preocupaciones en torno a la inflación del país. Dijo que la próxima semana dará más detalles de un problema que, advirtió, ya pega en el bolsillo de los mexicanos y es un tema de preocupación pública.

 

“La renovación de la línea de crédito con el FMI no está condicionada, porque México ha mantenido un sano y un fuerte marco macroeconómico”, precisó el ex secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en la administración de Felipe Calderón.

 

Recordó que el financiamiento del FMI incentiva a las naciones con una buena conducción económica y sus finanzas públicas, ya que es a quienes se les ofrece un monto importante de recursos económicos sin compromisos de por medio.

 

“La buena reputación de la economía mexicana ha permitido que tenga el voto de confianza del FMI, y la realidad es que se renovaría la línea de crédito en los mismo términos que se tiene contratada en este momento, incluyendo los montos”, añadió el responsable del banco central.

 

En abril de 2009, el gobierno mexicano recibió por primera vez 47 mil millones de dólares de una línea de crédito flexible, ya que se encontraba en una profunda recesión que la afectó ese año. Polonia y Colombia también cuentan con un crédito flexible, pero al igual que México no la han usado en los últimos años por la solidez financiera que muestran.