El empresario Armando Guadiana aseguró que le tiene sin cuidado la posibilidad de que el ex gobernador de Coahuila Humberto Moreira lo denuncie ante la Procuraduría General de la República (PGR) por posibles vínculos con el crimen organizado porque, dijo, no tiene nada que esconder.

 

“Nosotros no tenemos miedo ni tenemos nada que temer, si no, no estuviéramos aquí o ya anduviéramos corriendo”, expresó Guadiana ante diversos medios de comunicación.

 

Por el contrario, Guadiana arremetió contra el ex mandatario, y le “recomendó” desaparecer de los medios para que deje gobernar a su hermano, el actual mandatario estatal Rubén Moreira.

 

“Se le olvida a Humberto Moreira que ya no es gobernador, el gobernador es otra persona, se siente como en el maximato (sic) o tener influencia en ellos y ya no la tiene”, expresó.

 

Guadiana añadió que si Humberto Moreira no presenta las denuncias, él mismo le va a pedir que lo haga.

 

¿Por qué? Nosotros no vamos a descansar en la lucha ciudadana, que quieran poner cortinas de humo o asustar con el petate del muerto a un servidor no tiene por qué serlo ni tenemos ninguna problemática, externó.

 

“Que vaya también y aclare el modus vivendi que tiene actualmente de las propiedades que tiene a nombre de terceros, la Nogalera allá rumbo a Torreón bastante bonita que tiene.

 

Las propiedades que tiene en Villa de Santiago, vive en casas de San Antonio, se maneja en avión privado de aquí de Saltillo a San Antonio, frecuentemente y a todos lados”, indicó.

 

Incluso, Guadiana retó a un examen antidoping a Humberto Moreira, y consideró que el ex gobernador, citando a un político priista, lo que tiene es un problema demencial.

 

Aseguró que jamás ha sido operador políticos de ningún partido, ni siquiera del PRI, partido al que perteneció hace más de un año, del que fue miembro de “la base”.

 

El empresario dijo también que el ex gobernador debe respetar la muerte de su hijo José Eduardo.

 

“Porque convoca a los medios en una iglesia donde fueron a pedir la resignación a los familiares y aprovecha para hacer política para promoverse y no respeta el dolor humano de los familiares de él…”, aseveró.

 

Admitió que en 1994 le fue girada una orden de aprehensión, pero fue debido a la “prefabricación” de un delito, en el que los abogados de un banco sobornaron con 100 mil pesos a un juez federal para que girara una orden en contra él, por un problema que en realidad era mercantil y lo convirtieron en penal.