Entre señalamientos de que este sexenio es “el peor en los últimos 24 años” en materia económica, y reproches por la poca creación de empleos por parte de PRI, PRD, PVEM, Movimiento Ciudadano, PT y Nueva Alianza, se llevó a cabo la comparecencia del secretario de Economía, Bruno Ferrari, en la Cámara de Diputados.
Ante lo anterior, el funcionario señaló que el gobierno del presidente Felipe Calderón dejará un país mejor preparado, con una economía sólida y resistente a las grandes turbulencias internacionales, pero al mismo tiempo aseguró que aún hay mucho por hacer.
Como parte de la glosa del sexto informe de gobierno, Ferrari apuntó que México cuenta con una macroeconomía estable y con una destacada participación en el comercio mundial.
“Hoy, México es una economía más dinámica y más fuerte, con capacidad para generar empleos de mejor calidad y es una economía más atractiva para la inversión global”.
A esto, la diputada priista Maricela Velázquez señaló que el último informe de gobierno en materia económica “dista de la realidad y se aleja de las expectativas de un informe de cierre de gestión”, ya que el rubro económico es un “fracaso” de la actual administración debido a que no se promovió la inversión productiva con un carácter solidario, ni la defensa de la economía popular.
Ferrari anotó que durante este sexenio se logró fortalecer al país dentro de los mercados internacionales y su consolidación como potencia exportadora y destino de inversión, pues tan sólo el mercado exterior se fortaleció:
“Sólo en 2011 el valor del comercio (importaciones más exportaciones) creció 17% con respecto a 2010 y en los primeros nueve meses de 2012 el comercio ascendió a cerca de 550 mil millones de dólares”.
Ninguno de los diputados hizo preguntas o cuestionamientos en torno al pleito que mantiene con la industria automotriz, al anuncio de abrir las fronteras a la importación de papa de Estados Unidos, al posible cierre a la exportación de jitomate mexicano a esa nación, o del incremento en los precios del frijol, asuntos señalados por la organizaciones de productores como prioridad.
Ferrari pidió a los diputados modificar el marco legal para prohibir la práctica minera de carbón en tiros verticales, denominados “pocitos”, ya que representa un riesgo de grandes proporciones para los trabajadores, de ahí que deban prohibirse y sancionarse, o de lo contrario, se seguirán perdiendo vidas de mineros mexicanos.
“Estas minas verticales son orificios que se hacen en el piso de un metro y medio (de diámetro) que luego llegan a los 100 metros de profundidad, donde entra la gente a trabajar, el carbón está asociado al gas y si estalla, toda la gente muere”, dijo.