El embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhan, dijo que la reforma migratoria podría analizarse entre 2013 y 2014, pero no dependerá del voluntarismo de la diplomacia mexicana.
Durante la sesión plenaria “Nuevo capítulo en Los Pinos y en la Casa Blanca. Los cambios necesarios” en la X Cumbre de Negocios, pidió no cometer el error de creer que la reforma será resultado de la negociación de México.
Confió en que esta reforma se podría dar entre enero del próximo año y los primeros dos meses del 2014, pero eso dependerá de Estados Unidos y los liderazgos para el tema migratorio.
“Que no se vuelva a cometer el error de pensar que es un tema de voluntades de la diplomacia mexicana, es un tema de Estados Unidos, donde el gobierno mexicano sí se puede posicionar y fortalecer las estructuras de alianzas”, dijo.
Insistió que si se mantiene el error de pensar que la reforma va a llegar como resultado de una negociación entre México y Estados Unidos “nos vamos a encontrar con un chasco público y político”.
Además, se refirió a la posibilidad de modernizar el marco del Tratado de Libre Comercio, para tener un nuevo esquema comercial, sin entrar en un proceso de negociación.
En su momento, el coordinador de Asuntos Migratorios del equipo de Transición del presidente electo Enrique Peña Nieto, Arnulfo Valdivia, añadió que no sólo se deberá abordar el tema migratorio, sino también el laboral.