Mario Marín ha regresado por su revancha. Casi dos años después de entregar la administración, el Góber precioso reactivó a su grupo político al reunirlo en el hotel-spa Luna Canela y anunciarles que en breve regresará a la vida política de la entidad para influir en la elección de diputados y presidentes municipales del próximo año. El mensaje fue claro: “Vamos a derrotar a Moreno Valle y a recuperar Puebla para el PRI y para nosotros”.

 

A la convocatoria del Góber precioso acudieron ex secretarios como Gerardo Pérez Salazar, José Guadalupe Castillo y Víctor Manuel Sánchez Ruiz. Operadores electorales como Víctor Gabriel Chedraui y Joe Hernández Corona. En total, casi una veintena acudió al llamado de su jefe político.

 

El cónclave marinista echó de menos a dos de sus miembros distinguidos. Alfredo Arango García, ex secretario de Salud, preso bajo el cargo de enriquecimiento ilícito, y Javier García Ramírez, ex titular de Obras, quien se encuentra prófugo y es buscado hasta por la Interpol. De este último, el Góber precioso dijo: “Se encuentra bien cuidado”.

 

Las directrices principales del encuentro: 1) el poder de Moreno Valle se agotó con el triunfo del PRI en la elección presidencial. El 1 de diciembre arrancan sus horas bajas. 2. El morenovallismo no pudo acabar con la burbuja marinista pese a la ola de procedimientos penales y administrativos. “Nos hicieron lo que el viento a Juárez”. 3. El marinismo sigue siendo un grupo vigente, con capacidad de operación política. “Vamos a influir en la selección de los candidatos a alcaldes y diputados, hay que impulsar a nuestra gente”.

 

Los principales compadres y amigos del Góber precioso, Valentín Meneses y Mario Montero, sin embargo, no asistieron al Luna Canela, sin especificar los motivos de su ausencia. Tampoco se vio llegar a Javier López Zavala, su fallido heredero y a quien entregó la mayor parte de sus operadores políticos.

 

LAS REUNIONES

 

De acuerdo con fuentes consultadas, Mario Marín ha contactado a buena parte de sus ex colaboradores que hoy están en la inactividad laboral y política para hacerles una petición. Llamar a líderes de diversos sectores, dependiendo el ramo o zona en la que se hayan desempeñado, para convocarlos a una reunión con él.

 

Les ha dejado en claro que las reuniones deben cumplir dos requisitos: realizarse en casas particulares y sólo llamar a quienes estén identificados plenamente con el marinismo para evitar fugas de información o que el encuentro pueda ser filtrado a la prensa.

 

Hasta el momento, las fuentes aseguran que Marín Torres ha sostenido no más de cinco reuniones, tras el triunfo del PRI en la elección presidencial de julio, con sus ex colaboradores y con no más de 15 personas en cada una, siempre en domicilios particulares, sobre todo Atlixco y San Pedro Cholula.

 

Las mismas fuentes revelaron que en las últimas dos semanas Marín se ha animado a llamar a sus enlaces en el interior del estado para pedirles hacer lo propio, pues dice que para elección de 2013 irán por todo para recuperar Puebla y volver a ocupar los puestos que se merecen.

 

Rodolfo Chávez Carretero, propietario del hotel en que ocurrió la reunión, dijo que el encuentro simplemente se trataba de un convivio entre amigos y explicó que cada dos meses, desde que se terminó el sexenio marinista, se reunían para hablar de todo, menos de política. Que siempre se realizaba en una casa diferente y ahora le tocó ser el anfitrión en su hotel.