Las confrontaciones y venganzas al interior de la Procuraduría General de la República (PGR) tocaron ayer al responsable de las investigaciones contra el crimen organizado, José Cuitláhuac Salinas, quien renunció como titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO).
A sólo 15 días de que acabe el gobierno de Felipe Calderón, dejó el cargo aduciendo que era una decisión que había aplazado varias semanas y que los motivos eran personales.
Sin embargo, se trata de uno de los principales hombres de confianza de la procuradora Marisela Morales y del propio gobierno de Estados Unidos, con quien trabajaban en investigaciones conjuntas, entregaban información, y les permitían participar en interrogatorios a detenidos. Además, estaba al frente de investigaciones sensibles sobre lavado de dinero, corrupción y los grupos criminales.
Información de fuentes de primer nivel proporcionada por 24 HORAS, estableció que Salinas renunció a su cargo el miércoles en la noche, después de sostener una fuerte discusión con la titular de PGR. “Ayer la procuradora sólo quiso exhibir a Cuitláhuac Salinas, porque se sintió traicionada por él, por eso se filtró de esa forma información sobre su salida”, comentó una de las fuentes.
Desde hace varias semanas, detallaron las mismas fuentes, al interior de la PGR se vive una fuerte tensión por diversas razones ante el cambio de gobierno, una de ellas es la definición legal que deben dar a expedientes sensibles que existen contra ex gobernadores, secretarios del gabinete, funcionarios públicos de diferentes niveles involucrados en casos de corrupción o vínculos con el narcotráfico.
Eso provocó que las discusiones se intensificaran y las posturas sobre esas decisiones generaron divisiones importantes en el quipo de la procuradora.
Salinas, permaneció poco más de un año en la SEIDO, pero laboró con Marisela Morales en la última década, en distintos cargos dentro de la PGR.
Producto de esas confrontaciones fue removido de su cargo, por órdenes de Marisela Morales, el titular de la Unidad Especializada en Investigación de Asalto y Robo de Vehículos, Dax García Vidal.
Algunos de los funcionarios consultados dijeron que la renuncia de Salinas tiene fecha del 30 de noviembre, último día en el que cobrará su salario y todas las prestaciones respectivas, como los bonos de fin de sexenio, de fin de año y aguinaldo, entre otros.
En el lugar de Salinas, como encargado de despacho, quedó Rodrigo Archundia Barrientos, titular de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos en materia de Secuestro de la propia SEIDO.
Sorpresa
El jueves por la mañana, en su calidad de subprocurador, Salinas acudió como expositor a la XV Convención Nacional de la Asociación Nacional de Centros Cambiarios, en la que aseguró que se tenían identificadas, ante unas tres mil 600 formas de operar recursos de procedencia ilícita. El evento estaba programado para las 10:30 de la mañana, pero comenzó media hora tarde. Allí al subprocurador se le vio tranquilo, con el despliegue habitual de seguridad y hablando de los temas de la SEIDO.
Aproximadamente al medio día y rechazando dar alguna entrevista, Salinas abandonó el Hotel Meliá donde tuvo lugar el evento, para dirigirse a las oficinas de la Subprocuraduría en la colonia Guerrero.
Tres horas más tarde, en el portal de El Universal se revelaba que la procuradora había despedido a Salinas, porque, entre otras cosas, había indicios de que en su equipo había funcionarios vinculados con algunos delitos y posibles vínculos con la delincuencia organizada.
La información no fue desmentida, y hasta después de las ocho de la noche se emitió un comunicado en el que Salinas agradece al Ejecutivo federal haberle permitido trabajar en su administración.
En su carta de renuncia al cargo, el hasta ayer titular de la SEIDO agradeció al presidente Felipe Calderón y a la procuradora Marisela Morales la honrosa designación al cargo. Manifestó asimismo, las motivaciones de carácter “estrictamente personal” que lo llevan a asumir esta delicada decisión.
La procuradora por su parte, reconoció el trabajo de Salinas y su servicio en las difíciles tareas que le fueron encomendadas. Le deseó éxito en las actividades que emprenda como abogado y jurista mexicano.
“Salinas se va con el más amplio reconocimiento de la procuradora Marisela Morales, quien destacó su honestidad y entrega a las funciones que le fueron encomendadas como servidor público”, indicó la Procuraduría.
Presiones detrás de renuncia
Pese a la versión oficial, autoridades de la PGR indicaron a este diario que la renuncia de Salinas se dio en el marco de diversas presiones a las que estaba sometida su Subprocuraduría, principalmente por investigaciones que no acabaron de resolverse y de filtraciones de la delincuencia organizada sobre el área.
En las últimas semanas, la SEIDO estuvo colaborando con la línea de investigación que relacionaba a los policías federales que agredieron a funcionarios estadunidenses en la zona de Tres Marías con el crimen organizado; sin embargo, no se reunieron las pruebas necesarias para imputarles ese delito.
Pero el caso que sacudió de forma más latente a la Subprocuraduría en los últimos meses, fue la investigación que confirmó que funcionarios de esa área estaban vinculados con el Cartel del Pacífico, a quienes habían filtrado información de investigaciones.
El mismo Salinas informó el 17 de octubre que por ese caso, habían sido consignados siete funcionarios de distintas áreas, entre los que se encontraba Manuel Arroyo Hernández, integrante del Cuerpo Técnico de Control de la SEIDO. Agregó que el expediente seguía abierto, ante la posibilidad de que hubiera más servidores públicos involucrados.
Una de las versiones que también difundió ayer el portal de El Universal, fue que hasta ayer subprocurador había mostrado resistencia a que funcionarios de su área fueron suspendidos e investigados en el marco de la indagatoria pro la desaparición de del joven Jesús Gutiérrez Olvera, caso por el que Morales pidió públicamente perdón a los familiares de la víctima.
En el transcurso del día, 24 HORAS recorrió las inmediaciones de las instalaciones de la SEIDO en la colonia Guerrero, en donde no se apreció movimiento significativo, salvo la presencia de dos camionetas de la Secretaría de la Defensa Nacional con aproximadamente ocho soldados, que se encontraban en el estacionamiento por el que acostumbraba salir Cuitláhuac Salinas.
El incondicional de la procuradora
Ubicado como un funcionario cercano a la ahora procuradora General de la República, Marisela Morales Ibáñez, desde la administración foxista, José Cuitláhuac Salinas Martínez, ocupó puestos que pasaron desde director de área hasta llegar el 1 de noviembre de 2011 a la titularidad de la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).
De carácter complicado, a decir de algunos funcionarios de la PGR, quien duró un año como zar antinarco era presentado por la procuradora como un funcionario con experiencia en el Poder Judicial. Ello porque Salinas pasó por el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, por la Suprema Corte de Justicia y el Poder Judicial Federal.
Huidizo de los medios de información en temas complicados, como ocurrió con el amparo en revisión de la francesa Florence Cassez, Salinas Martínez fue señalado hace dos meses de haber sido quien filtró la información en contra del ex trabajador de la corte, Juan Carlos de la Barrera Vite, acusado de vender información sensible al Cártel de Sinaloa.
El ahora ex titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) fue durante los sexenios panistas director general de Investigación y Análisis, subprocurador regional de Procesos Penales y Amparo, coordinador de Asesores, Fiscal y coordinador general en la Unidad Especializada en Investigación y Tráfico de Menores Indocumentados. MÓNICA HERNÁNDEZ
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