LA PIEDAD. En su primer aparición desde que sufriera un fallido intento de asesinato, el edil de Tanhuato, Gustavo Garibay García, reveló que el grupo armado que atentó contra su vida lo hizo en represalia porque su administración no les entregó contratos o adjudicaciones directas para hacer las obras que se realizan en su municipio.

 

Tras recibir un espaldarazo público por el presidente Felipe Calderón, quien le reconoció su “valentía y arrojo”, Garibay García señaló que por el momento cuenta con la protección de elementos de la Policía federal, estatal y ministerial, y enfatizó que no se retirará de su cargo; “no me voy a rajar”.

 

Con un cabestrillo para soportar su brazo izquierdo, con sus manos vendadas y un parche en la nariz, Gustavo Garibay narró los hechos del pasado 31 de octubre: “Lo único que recuerdo es a esos hombres con armas y que reaccione y me tire al suelo, ellos venían a asesinarme”.

 

Producto de ese ataquem el alcalde sufrió la ruptura en una muñeca y un rozón en la nariz, sin embargo no pierde el ánimo: “ya me están atendiendo y vamos bien”.

 

El alcalde panista reconoció que en varias ocasiones grupos criminales le exigieron que les adjudicara a ellos las licitaciones que el ayuntamiento hacía para obras públicas, y ante su negativa, sufrió el ataque en su contra.

 

Destacó que en Tanhuato se están realizando varios proyectos en conjunto con la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, y destacó que “antes” en su municipio se les entregaban las obras “a gente que las alteraba, pero nosotros seguiremos trabajando con SCOP”.

 

Agregó que ya recibe el beneficio de los protocolos de seguridad y de solicitó al presidente electo, Enrique Peña, para que mantenga la seguridad, y no sólo para los ediles, sino para los habitantes de cada uno de los municipios.