Durante su última gira de trabajo como presidente de México por Michoacán, Felipe Calderón se animó a cantar con una banda la canción “El perro negro”, de José Alfredo Jiménez, y entonó la melodía alegre, aunque desentonado.

 

Al explicar los beneficios del libramiento La Piedad que inauguró, se refirió al tiempo que se perdía para cruzar de Michoacán a Guanajuato y parafraseó dicha canción: “Hay que recordar: del otro lado del puente, de La Piedad, Michoacán, vivía Gilberto, El Valiente, nacido en Apatzingán…”.

 

El Presidente le pidió a un grupo de músicos que se pusieran a tocar y junto con el público coreó las estrofas de la canción, que luego dejó de cantar porque “si no, aquí nos picamos”.

 

Calderón señaló que pedirá a Enrique Peña Nieto que mantenga el apoyo a todos los municipios de Michoacán que son afectados por la delincuencia organizada, a fin de proteger la paz de todos sus paisanos.

 

“Hablaré personalmente con el presidente electo para que continúe con un apoyo y se fortalezca el apoyo a los alcaldes de Michoacán y, particularmente, de esta zona, que están constantemente asolados por la delincuencia y que necesitan ser fortalecidos”.

 

El jefe del Ejecutivo dijo que la seguridad para los mandatarios es fundamental y saludó a Gustavo Garibay, presidente municipal de Tanhuato, quien sobrevivió a un atentado hace unos días.