EL CAIRO. Hamas no dejará de armarse, dijo el sábado el segundo al mando de la milicia que gobierna Gaza, quien destacó los desafíos que vienen para las negociaciones indirectas entre Israel y el grupo islámico palestino, sobre un nuevo acuerdo fronterizo para la franja territorial.
Egipto es intermediario de las negociaciones y también ayudó a conseguir un cese al fuego que acabó con ocho días de violencia entre Israel y Hamas en Gaza a comienzos de esta semana.
La tregua entró en vigor el miércoles por la noche y se ha mantenido en su mayor parte. Los habitantes de Gaza dijeron que Israel ya comenzó a relajar algunas restricciones fronterizas permitiendo a los pescadores adentrarse más en el mar y que los agricultores inspeccionen la tierra en una zona que estaba restringida.
Moussa Abu Marzouk, subalterno de Jaled Mashal, el máximo líder de Hamas en el exilio, dijo que las negociaciones para relajar todavía más las restricciones se llevarán a cabo el lunes en El Cairo. Hamas e Israel no se reunirán directamente y las discusiones se llevarán a cabo a través de intermediarios egipcios.
Un oficial de seguridad israelí indicó que Israel podría condicionar un importante alivio al bloqueo fronterizo en Gaza a la disposición de Hamas a dejar de adquirir armas. Los funcionarios israelíes no habían comentado al respecto el sábado.
Sin embargo, Abu Marzouk rechazó tales demandas.
“Estas armas nos protegen y no hay forma de que dejemos de obtenerlas y fabricarlas”, dijo en una entrevista en su oficina a las afueras de El Cairo.
Autoridades palestinas en Gaza han dicho que desarrollaron una industria local armamentística. Y Mashal ha manifestado que el grupo recibe armas de Irán. Hamas introduce estas armas a Gaza a través de túneles bajo la frontera con Egipto.
También el sábado, decenas de miles de niños en Gaza regresaron a la escuela por primera vez desde que el combate cesó el miércoles por la noche. Cerca de la mitad de los 1.6 millones de habitantes en Gaza son niños.
El cese del fuego negociado por Egipto puso fin a ocho días de combates transfronterizos que cobraron las vidas de 166 palestinos y seis israelíes, de acuerdo con funcionarios del sector salud. Entre quienes murieron en los combates se encuentran 34 niños y jóvenes menores de 18 años, informaron funcionarios de salud de Gaza y grupos defensores de los derechos humanos.
En 245 escuelas operadas por Naciones Unidas, el día fue dedicado a que los niños compartieran sus experiencias, con la esperanza de ayudarlos a superar el trauma, de acuerdo con los pedagogos.
El intercambio de fuego fue el más sangriento entre Israel y Hamas en cuatro años. Israel lanzó la ofensiva para poner fin a un creciente ataque con cohetes desde Gaza hacia poblaciones israelíes. El gobierno israelí dijo haber alcanzado sus objetivos, mientras que Hamas cantó victoria debido a que Israel no cumplió sus amenazas de enviar fuerzas terrestres al territorio, como lo hizo hace cuatro años.
La fuerza aérea israelí realizó cerca de 1.500 bombardeos en blancos vinculados con Hamas, mientras que los combatientes en Gaza lanzaron casi la misma cantidad de cohetes, entre ellos algunos que hicieron blanco en ciudades del centro de Israel, como Tel Aviv y Jerusalén por primera vez.
Se espera que la tregua lleve a un nuevo acuerdo fronterizo para Gaza. Egipto coordinará las negociaciones indirectas entre Israel y Hamas. Israel considera a Hamas un grupo terrorista y se niega a negociar con la organización de manera directa. (AP)