ATENAS. El primer ministro griego, el conservador Andonis Samarás, prometió inyectar en la economía real la mayor parte de los nuevos tramos de financiación aprobados la pasada noche durante la reunión del Eurogrupo.

 

En una comparecencia en la que no admitió preguntas, Samarás aseguró que «por primera vez, sólo el 10% (del tramo) irá al pago de intereses y amortizaciones», ya que hasta ahora el 85% de la financiación internacional se dedicaba al pago de la deuda externa.

 

La Eurozona y el Fondo Monetario Internacional (FMI) acordaron entregar antes del 13 de diciembre 34 mil 500 millones de euros del rescate de 130 mil millones pactado a principios de año.

 

Otros 9 mil 300 millones serán desembolsados durante el primer trimestre de 2013, siempre y cuando el país cumpla con las exigencias de la troika.

 

El primer ministro prometió que en los tres próximos meses se pagarán las deudas del Estado a los proveedores privados (que asciende a 9 mil millones de euros).

 

También explicó que se llevará a cabo la recapitalización de la banca -para lo que se estima se necesitan unos 24 mil millones- de manera que se «proteja los ahorros del pueblo griego» y se «abra el camino para recuperar la liquidez en la economía griega».

 

«Termina un periodo dominado por el pesimismo en el interior, por la falta de fiabilidad externa y por una incertidumbre general sobre el futuro de nuestro país», proclamó Samarás, quien subrayó que el nuevo acuerdo facilitará la reducción de la deuda griega al extenderse el periodo de los préstamos y reducirse los intereses.

 

Las nuevas proyecciones de la UE y el FMI prevén que la deuda griega, actualmente equivalente al 170% de su PIB, se reduzca al 124% en 2020 y al 110% en 2022.

 

Sobre el acuerdo, el presidente de Francia, François Hollande, afirmó que va a permitir «despejar todas las dudas» sobre la eurozona y crear «un clima de confianza».

 

«La resolución de la crisis griega va a permitir ahora despejar todas las dudas sobre el futuro de la zona euro, su integridad, su perennidad», indicó en una conferencia de prensa tras haberse reunido en París con el primer ministro belga, Elio di Rupo.

 

Hollande no quiso dejar pasar la oportunidad para enfatizar que «es el resultado positivo de una acción llevada a cabo por Francia desde hace seis meses para confirmar el anclaje de Grecia en la zona euro». EFE