El exguardameta colombiano Miguel Calero, sedado desde hace dos días en un hospital mexicano por una trombosis, presentó hoy una inflamación cerebral aunque su vida no corre peligro, informó la directiva del equipo Pachuca.
“Queremos resaltar y señalar que la vida de Miguel Calero no se encuentra en peligro”, indicó en un comunicado de prensa la directiva del equipo y su director de servicios médicos, José Antonio Torres.
Los médicos detectaron la inflamación en la tomografía de este día y en las próximas horas decidirán si le hacen a Calero “maniobras de descompresión quirúrgica” que son “un procedimiento de carácter preventivo”, apuntó la directiva.
Calero, director técnico de porteros del Pachuca, ingresó al hospital el pasado domingo por una trombosis de la arteria carótida por la que se le sometió a un cateterismo tras de lo cual ha permanecido sedado.