NACIONES UNIDAS. Las autoridades palestinas han solicitado al Consejo de Seguridad de la ONU que actúe con “urgencia” ante lo que consideran la última “provocación” de Israel por seguir adelante con la expansión “ilegal” de sus asentamientos en Cisjordania y Jerusalén Este.
“El liderazgo palestino condena la última provocación de Israel y llama a la comunidad internacional a reafirmar su inequívoca condena a este tipo de actividades que amenazan la viabilidad de la solución de dos estados”, afirmó el representante palestino ante la ONU, Riyad Mansour, en una carta remitida al Consejo de Seguridad.
En la misiva, el embajador Mansour pide al Consejo de Seguridad que actúe con “urgencia” para “salvar” la solución de los dos estados, que cuenta con el apoyo mayoritario de la comunidad internacional, y que exija a Israel abandonar su política de “colonización y agresiones” al pueblo palestino.
El Gobierno de Israel aprobó la semana pasada la construcción de 3 mil nuevas viviendas en los barrios palestinos de Jerusalén Este y en los territorios ocupados de Cisjordania en respuesta al reconocimiento de Palestina como Estado observador no miembro de la ONU por parte de la Asamblea General.
“Hay que mandar un mensaje claro a Israel para advertirle de que o pone fin a sus actividades ilegales o afrontará las consecuencias por obstruir los esfuerzos para la paz”, indica el embajador en la misiva, firmada por primera vez por el “observador permanente del Estado de Palestina ante la ONU”.
Precisamente ayer, el Comité Político de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) aseguró que Israel está empujando al liderazgo palestino a denunciar la construcción de asentamientos ante la Corte Penal Internacional (CPI), según dijo su presidente, Nabil Shaath.
“Cuando cometes crímenes, tienes que enfrentarte a las consecuencias. Si no quieren ir a la CPI, que no cometan crímenes. Y, si no los han cometido, no debería darles miedo que les llevemos ante el tribunal”, añadió.
Según Shaath, si Washington y las capitales europeas, que han aumentado su condena y la presión a Israel para que retire de la mesa los planes de crecimiento de las colonias, consiguen su objetivo, entonces, Palestina no tendrá que recurrir a la corte de La Haya.
“No podemos discutir paz por territorios cuando se van comiendo la paz pieza a pieza (juego de palabras con las palabras en inglés ‘peace’ y ‘piece’, paz y pieza), afirma Shaath.
Según él, lo que los israelíes han hecho tras la decisión de la ONU de reconocer el pasado el viernes el Estado palestino “es precisamente lo que destruyó (hace dos años) el proceso de paz”, ampliar las colonias.
El reciente cambio de estatus en la ONU al de Estado observador no miembro podría abrir la puerta a Palestina para acudir a la corte y reclamar el cumplimiento de las convenciones internacionales de derecho de guerra y humanitario que, entre otras cuestiones, consideran un crimen la transferencia de población de la potencia ocupante al territorio ocupado. EFE