De los 11 mil empleados que Citigroup despedirá en todo el mundo para ahorrar dinero y tratar de hacer más rentable sus operaciones, sólo 48 son mexicanos.

 

El nuevo presidente del banco, Michael Corbat, anunció ayer el recorte de 11 mil trabajadores, de los cuales, dos mil 100 personas corresponden a alguno de sus negocios en América Latina.

 

“Estas acciones son las siguientes etapas lógicas en la transformación de Citi”, dijo Corbat, quien tomó sus funciones en octubre pasado. “Vamos a mejorar nuevamente nuestra eficacia operacional reduciendo las capacidades y gastos excesivos”.

 

En México el impacto es casi imperceptible porque para Citigroup, el Grupo Financiero Banamex es un negocio estratégico, ya que le genera 10% de las utilidades a escala mundial.

 

De acuerdo con Paulo Carreño King, director de Comunicación de la institución bancaria, el despido de 48 empleados en México como parte de una estrategia global, es duro.

 

Sin embargo, recuerda que la pérdida de 28 de esas plazas laborales se dio por prejubilaciones, jubilaciones o renuncias, que la institución bancaria ya no quiso cubrir. Y aseguró que son puestos de áreas no estratégicas para la institución en este país.

 

Los despidos de la filial en Banamex Citigroup se dieron especialmente en el área de inversiones conocida como equity, un negocio que después de la crisis económica de 2008, por la quiebra del banco de Lehman Brothers, ya no fue el mismo, precisó.

 

Comentó que la apuesta de Citigroup continuará en el mercado de consumo en la República Mexicana, incluso el próximo año seguirán abriendo un mayor número de sucursales bancarias.

 

“Los países emergentes van a tener mejores oportunidades. Dentro de los emergentes hay unos que ya están en la segunda parte de la curva, es decir, que se ha notado una desaceleración, como es el caso claramente de Brasil, Uruguay y Paraguay”, explicó a 24 HORAS Carreño.

 

“Y hay otros que están creciendo, como México, donde pensamos abrir sucursales durante el próximo año. Citigroup está restructurándose para crecer mejor y ser más eficiente”, añadió.

 

Los recortes anunciados representan 4% de las 260 mil personas que Citigroup tiene en el mundo, lo que le costará mil millones de dólares en pagos de compensaciones.

 

Esta medida significa para el grupo bancario un ahorro de gastos de 900 millones de dólares para 2013 y de mil 100 millones de dólares para el siguiente año. Citigroup prevé un impacto limitado de sus ingresos anuales, con una reducción de menos de 300 millones de dólares. El año pasado, el banco registró un ingreso de 78 mil 350 millones de dólares.

 

Citigroup expresó que venderá o reducirá de manera significativa sus operaciones en Pakistán, Paraguay, Rumania, Turquía y Uruguay, y espera optimizar su presencia en las grandes metrópolis con el cierre de 14 sucursales en Brasil, siete en Hong Kong, cuatro en Hungría, 15 en Corea y 44 en Estados Unidos.

 

“Citi se enfocará en las 150 grandes ciudades que tienen los mayores potenciales de crecimiento en la banca de consumo”, expresó el grupo bancario.

 

Tras el anuncio de los despidos, las acciones de Citigroup subieron 6.55% en la Bolsa de Nueva York. En la Bolsa Mexicana de Valores, las acciones del banco cerraron en 471.75 pesos, es decir, ganaron 6.82%.

 

El banco ha sido muy afectado por la última crisis financiera, la cual lo obligó a suprimir 50 mil empleos en noviembre de 2008. El año pasado, anunció otro recorte de cuatro mil 500 puestos.