Durante el primer día del juicio a los 18 falsos periodistas mexicanos detenidos en Nicaragua, el fiscal Yiscar Moraga, pidió al juez Edgar Altamirano un fallo de culpabilidad por los presuntos delitos de lavado de dinero, crimen organizado y tráfico internacional de drogas.

 

El fiscal comentó que de acuerdo con las investigaciones “el dinero (9.2 mdd) presentaba partículas de cocaína lo que evidencia el origen ilícito” y su finalidad “era el transporte de estupefacientes”.

 

En ese sentido aseguró que las camionetas con logotipos de Televisa “eran parte del enmascaramiento” de las acciones ilícitas como “transportar dinero” de México a Costa Rica y estupefacientes en la ruta inversa, agregó.

 

Las pruebas para alimentar la hipótesis incluyen bolsas de plástico al vacío y máquinas para sellar “utilizadas para empacar la cocaína para que no sean detectadas” por la técnica canina en los procesos de revisión de los vehículos, refirió.

 

La Fiscalía de Nicaragua pidió hoy un fallo de culpabilidad contra 18 mexicanos detenidos aquí, presuntos integrantes de “una estructura del crimen organizado” que operaba en Centroamérica en el tráfico de cocaína y transporte de dinero desde 2008.

 

En la audiencia de juicio oral y público que comenzó este lunes, el fiscal Yiscar Moraga, pidió al juez Edgard Altamirano un fallo de culpabilidad por los presuntos delitos de lavado de dinero, crimen organizado y tráfico internacional de drogas en contra del grupo.

 

Contradicciones en declaraciones levantaron sospechas

 

Además durante el juicio, los testigos, que salieron con los rostros ocultos por medidas de seguridad, refirieron que múltiples contradicciones en las declaraciones de los 18 mexicanos sobre el motivo por el que se encontraban en Nicaragua fue lo que generó sospecha en el caso.

 

Uno de los testigos, dijo que Raquel Alatorre Correa, presunta jefa del grupo de falsos periodistas, declaró que realizaban en países de Centroamérica una investigación para Televisa sobre el supuesto enriquecimiento ilícito de un prominente empresario mexicano.

 

El testigo, identificado solo como un oficial detective de la policía, dijo que Alatorre Correa declaró al momento de su ingreso en la frontera norte que realizaban “una investigación periodística sobre un ciudadano de origen mexicano (de nombre) Carlos Slim”.

 

El detective aseguró que la ahora procesada reveló que el presunto trabajo periodístico en países de Centroamérica era un encargo de la televisora mexicana y que tenían tres años de haber comenzado sus investigaciones.

 

El testigo dijo que los vehículos portaban un documento firmado por el vicepresidente de información nacional de Televisa, Amador Narcia, quien pedía trato especial para los presuntos periodistas. Sin embargo, la movilización de la caravana despertó sospechas.

 

Raquel Alatorre Correa era la encargada de efectuar los trámites migratorios y declaró que llegaron a Nicaragua “a realizar una investigación sobre lavado de dinero de parte de un mexicano”.

 

Alatorre “condujo todo el material para el despacho migratorio”. El resto del grupo “la llamaba la licenciada y no hacía ninguna acción sin su permiso”, afirmó el testigo.

 

Dos oficiales efectuaron las entrevistas por separado a cada uno de los 18 mexicanos que ingresaron al país centroamericano en seis camionetas con logotipos de la empresa de televisión y 9.2 millones de dólares ocultos en su interior.

 

Sin embargo, los extranjeros se negaban a brindar información, porque adujeron que “habían firmado un contrato de confidencialidad en México y hasta después iban a publicar su trabajo”.

 

Las entrevistas que comenzaron el 20 de agosto pasado en la aduana finalizaron en horas de la madrugada del día siguiente, cuando se decidió el traslado del grupo a Managua, la capital del país, donde tras varios cambios de fecha comenzó el juicio este lunes. (Con información de Notimex)