Los abogados del ex gobernador Tomás Yarrington, acusado por la Procuraduría General de la República (PGR) de supuestos vínculos con el narcotráfico, insistieron en la inocencia de su cliente, aunque aclararon que por el momento el ex mandatario no reaparecerá pues existe el riesgo de que sea detenido.

 

En una conferencia de prensa , el equipo legal de Yarrington tanto en México como en Estados Unidos, resumió que el caso tuvo una motivación “política”, y que se dio en un contexto electoral en el cual se quiso perjudicar a la campaña del ahora presidente Enrique Peña Nieto.

 

El abogado Marco Tulio Ruiz Cruz, insistió en que el caso de la PGR esta sostenido en los dichos de “testigos protegidos” que no tienen sustento, y que fuera de ellos no se ha mostrado ninguna otra prueba, aunque aclaró que tampoco han tenido acceso al expediente.

 

Dijo que la relación del ex gobernador con otros empresarios que han sido señalados en las redes de lavado de dinero como Fernando Cano y Napoleón Rodríguez es de amistad, y cuando el estuvo al frente del gobierno de Tamaulipas participaron en varios proyectos pero negó que existan irregularidades.

 

“En especial el señor Fernando Cano es un empresario del ramo de la construcción que tiene muchos negocios pero no solo con Tamaulipas sino también con el gobierno federal y de otros estados, incluso participó en la construcción de los segundos pisos del Distrito Federal; no hay nada fuera de lugar en eso”, sostuvo.

 

Ruiz Cruz afirmó que Yarrington está enfrentando las acusaciones que se le han imputado con los recursos legales con los que cuenta, entre ellos un amparo en contra de la orden de aprehensión que se le giró por delitos contra la salud.

 

Aclaró que en estos momentos el ex mandatario no puede reaparecer ante la opinión pública pues exista una orden con la que se le pretende privar de la libertad, pero apuntó que lo hará cuando logren ganar el amparo interpuesto.

 

El litigante también insistió en que llevó a cabo el Ministerio Público en propiedades de Yarrington en la Ciudad de México y en Matamoros fueron ilegales pues no existía orden judicial, e incluso indicó que podría haberse registrado un saqueo, pues no se inventariaron objetos que estaban e las propiedades, como una colección de vinos.

 

En tanto el abogado de Yarrington en Estados Unidos abogado Joel Androphy, señaló que la propiedad en Texas que confiscó el gobierno de ese país no es propiedad del ex gobernador sino del empresario Napoleón Rodríguez, y no existe documento alguno que lo relacione con ese inmueble.

 

“En los Estados Unidos no existe ninguna acusación de tipo penal en contra de Tomás Yarrington, y cualquier delito que se pudiera haber cometido prescribe a loa cinco años por lo que ya no es posible que exista una indagatoria sobre hechos que hayan ocurrido antes del 2007”, sentenció.