Dos días después de la masacre perpetrada en la primaria Sandy Hook en Newtown, Connecticut, la comunidad entera se reunió en una vigilia nocturna para rendir homenaje a las víctimas del joven de 20 años Adam Lanza. Al servicio interreligioso acudió el presidente estadunidense Barack Obama para reunirse con las familias que perdieron a sus seres queridos.
La tragedia que dejó 27 muertos, incluidos 20 niños y el autor del ataque reunió a distintos representantes de diversas religiones que dieron sus condolencias, entre ellos estuvieron representantes de la Iglesia Congregacional; rabinos; musulmanes que dieron lectura del Corán; metodistas; católicos y protestantes.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, expresó palabras de aliento y esperanza a los familiares de las víctimas de Newtown, Connecticut.
“La Escritura nos dice que no perdamos la esperanza, que si nos sentimos destrozados nos estamos renovando día a día”.
“Como nación estamos juntos”, sostuvo.
Vengo a ofrecer el amor y las oraciones de toda una Nación, manifestó a en su discurso.
“Nos reunimos aquí en memoria de 20 hermosos niños y seis adultos notables que perdieron sus vidas en una escuela que pudo haber sido cualquiera, en un pueblo decente que pudiera ser cualquiera de Estados Unidos”.
“Ustedes no están solos”, dijo Obama en un emotivo discurso.
De igual manera el presidente Obama dijo que estaba consiente de que las simples palabras no pueden sanar su corazones heridos.
“Hemos abrazado más a nuestros hijos y ustedes deben saber que cualquier medida que podamos hacer para mejorar las cosas, lo haremos”.
Obama anunció que usará toda su fuerza para confrontar este tipo de tiroteos que han quitado la vida a tantos ciudadanos, la mayor parte de ellas de niños.
Sin embargo no fue específico con qué tipo de medidas lo evitaría pero aseguró que hará frente a las leyes que se han opuesto al control de armas por años.
“Usaré todo mi poder para comprometer más a los ciudadanos en un esfuerzo para prevenir más tragedias como esta.” enfatizó Obama.
El autor de los hechos, Adam Lanza, de 20 años, usó un rifle semiautomático Bushmaster 223 para cometer la matanza, a la que llevó también dos pistolas semiautomáticas, una Glock y una Sig Sauer. AGENCIAS