WASHINGTON. El jefe de seguridad del Departamento de Estado y dos funcionarios presentaron su renuncia este miércoles luego de que ayer se diera a conocer un informe independiente acerca del ataque al consulado de Bengasi en Libia en septiembre pasado.

 

Dicha investigación revela fallos de seguridad antes de ese ataque y culpa de ello al Departamento de Estado, según la parte del informe no clasificada hecha pública hoy.

 

El informe, recibido este lunes por la secretaria de Estado, Hillary Clinton, critica duramente al Departamento de Estado por la “falta de personal experimentado y probado” para garantizar la seguridad del consulado, que estaba siendo protegido básicamente por “milicias locales”.

 

Según la investigación, el Departamento de Estado “ignoró” peticiones de funcionarios de la embajada en Trípoli para mejorar la seguridad del consulado en Bengasi antes del ataque, en el que murieron el embajador estadounidense en Libia, Chris Stevens, y otros tres compatriotas.

 

El Departamento de Estado “esperó (a recibir) advertencias de ataques inminentes para actuar en lugar de adaptar los procedimientos y protocolos en un entorno de deterioro de la seguridad”.

 

La parte no clasificada del informe fue divulgada hoy por el Departamento de Estado y confirma, además, que no hubo protestas contra un vídeo antimusulmán a las afueras del consulado, como se indicó en un principio, sino que se trató de un ataque cometido por terroristas.

 

Pese a que la investigación culpa a dos agencias del Departamento de Estado, la de seguridad diplomática y la de Asuntos de Oriente Próximo, de no haber coordinado un plan de seguridad adecuado para el consulado, no considera que se deba iniciar una acción disciplinaria contra ningún funcionario.

 

El almirante retirado Michael Mullen, un exjefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, y el exdiplomático Thomas Pickering fueron los autores de la investigación independiente, encargada por la propia Clinton.

 

Este miércoles Mullen y Pickering acudirán al Congreso para responder a puerta cerrada a preguntas sobre el informe.

 

Clinton debía comparecer el jueves ante los comités del Congreso que investigan lo ocurrido en Bengasi, pero no podrá hacerlo porque sufrió un desmayo y una caída la semana pasada que le ocasionaron una contusión en la cabeza.

 

Con información de EFE y AP