La selección mexicana de fútbol completó un 2012 de ensueño, al terminar con paso perfecto la fase semifinal de las eliminatorias mundialistas y la conquista de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres.
El camino al Mundial de Brasil se pondrá en marcha el 6 de febrero al recibir a Jamaica en el inicio de la etapa decisiva de la CONCACAF, en la que también intervendrán Estados Unidos, Costa Rica, Honduras y Panamá.
Los mexicanos ya se ven en el Mundial y de hecho toman su participación en la Confederaciones, el torneo de ensayo para el país anfitrión, como un fogueo para la cita de Brasil en 2014.
“Es un año que servirá de termómetro, especialmente la Confederaciones porque es un año antes del Mundial y además no sirve para la Copa de Oro porque queremos seguir ganándola”, dijo el presidente de la Federación Mexicana de Fútbol, Justino Compeán. “El compromiso que tenemos es ser protagonistas, esos son nuestros deseos”.
Después de encarar a los jamaiquinos, México disputará otros cinco encuentros de eliminatoria mundialista, incluyendo uno ante Estados Unidos el 26 de marzo antes de hacer una pausa para encarar el campeonato de selecciones de la CONCACAF y luego la Confederaciones.
Será una apretada agenda. La Confederaciones se disputará del 15 al 30 de junio. La Copa de Oro, que se disputará en Estados Unidos, comienza el 7 de julio y termina el 28 del mismo mes.
En el pasado, México ha tenido conflictos similares con la Copa de Oro y la Copa América. Los dirigentes han optado por armar dos selecciones, algo que no ha sido descartado para esta ocasión.
“Es difícil decir que vamos a tener dos selecciones”, dijo el entrenador José Manuel De la Torre en diciembre pasado. “Selección nada más hay una y es la que representa a México, sea quien sea quien esté al frente. Eso hay que dejarlo muy claro, no hay una selección A, no hay una selección B, somos todo un grupo de trabajo que representa a México”.
Aunque México aún no conoce sus rivales para la Copa de Oro, en la Confederaciones tiene duros oponentes porque quedó situado en el Grupo A junto a Italia, Brasil y Japón.
“Sabemos que no va a ser nada fácil, pero vamos con la firme intención de lograr el objetivo máximo”, dijo De la Torre, quien ostenta un inmaculado récord de 12-0 en torneos oficiales. “Nos enfrentaremos a selecciones de alto nivel pero en los Juegos Olímpicos muchos creyeron que no podríamos entrar al medallero, pero nos preparamos y conseguimos el oro ante la favorita Brasil”.
México también tiene programados al menos cuatro amistosos para el 2013, el primero de ellos el 30 de enero cuando enfrenten a Dinamarca, en Phoenix, Arizona.
Los planes concretos para encarar el 2013 serán anunciados durante los primeros días de enero, informó el director de selecciones nacionales, Héctor González Iñárritu.
“Hay que trabajar siempre con objetivos altos y no nadar en la mediocridad o en la zona de confort de decir que sólo vamos a participar y a ver qué hacemos”, dijo González Iñárritu.
Después de encarar los dos torneos de mitad de año, México reanudará su camino hacia el Mundial el 6 de septiembre cuando reciba a Honduras y cuatro días después tiene una visita clave a Estados Unidos.
Los mexicanos cierran el hexagonal en octubre, cuando recibirán primero a Panamá y luego visitará a Costa Rica.
“No van a ser unas eliminatorias fáciles, pero si México mostró algo en la ronda pasada es jerarquía, impuso su juego y confío en que sigan por esa línea para el hexagonal final”, dijo a la AP el ex seleccionador mexicano, Manuel Lapuente, mundialista en Francia 1998. “Si bien el estilo de juego no ha convencido a muchos, los resultados ahí están y creo que ya luego vendrán las formas”.