FRESNO. Si bien está todavía en construcción, una escuela de Salinas en California,  se encuentra en el medio de un encendido debate porque su junta decidió darle el nombre de Tiburcio Vásquez, uno de los “bandidos” más notorios del Viejo Oeste.

 

Para algunos, Vásquez fue un delincuente que robó y aterrorizó a los californianos en el siglo XIX y que terminó siendo colgado por asesino. Esos sectores consideran que se glorifica la violencia si se le da su nombre a la escuela.

 

Pero en una ciudad donde dos tercios de la población es hispana, abundan los residentes de ascendencia mexicana que afirman que Vásquez simplemente defendió su tierra, su cultura y a la comunidad hispanohablante ante los embates de colonos blancos que se apoderaron el estado en busca de oro y al amparo de la doctrina del Destino Manifiesto, que justificaba la expansión de Estados Unidos hacia el océano Pacífico.

 

Para el superintendente del distrito escolar de Alisal Union, John Ramírez Jr., sin embargo, darle a la escuela el nombre de Vásquez es una forma de condenar la discriminación y de reivindicar la cultura mexicana.

 

El barrio de Alisal, conocido también como East Salinas,  es habitado mayormente por familias de campesinos de origen mexicano que trabajan en el Salinas Valley, llamado “la “Ensaladera del Mundo”.

 

Es el barrio más pobre de Salinas y está azotado por la violencia pandillera.