LIMA. Un total de 27 adolescentes escaparon del Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación de Lima, en dos fugas ocurridas entre el 31 de diciembre y el 1 de enero, dijo hoy el ministro peruano del Interior, Wilfredo Pedraza, quien agregó que su detención es “cuestión de horas”.

 

La fuga en dos grupos de 13 y 14 personas ocurrió en la víspera y durante las primeras horas del Año Nuevo. La Policía logró ubicar y detener nuevamente a ocho de los adolescentes en varias calles del distrito de San Miguel, donde está ubicado el centro juvenil.

 

Pedraza dijo a Radio Programas del Perú (RPP) que la búsqueda, a cargo de tres equipos de la Policía, se está realizando en todo el país y confió en que “la recaptura de la mayoría es una cuestión de horas”.

 

Entre los fugitivos se encuentra el adolescente de iniciales A.P.G., conocido con el apelativo “Gringasho”, de 17 años, que es considerado por las autoridades y la prensa local como uno de los sicarios más peligrosos del país y que ya anteriormente había logrado fugarse de los centros de reclusión a los que ha sido enviado.

 

“Por la rapidez con la que se ha reaccionado es muy poco probable que alcancen las fronteras y que hayan salido de Lima”, agregó el ministro.

 

Pedraza coincidió con los reclamos de la municipalidad de San Miguel, que pide el traslado de este reformatorio, en que se puede buscar “un lugar mucho más seguro” para los internos y los vecinos de la zona.

 

“Se trata de adolescentes que por su grado de peligrosidad nos obliga a tomar medidas excepcionales y eso no afecta ningún derecho”, indicó.

 

Los internos del centro conocido como “Maranguita” aprovecharon el ingreso de camiones al lugar, para reducir a los vigilantes de la puerta y alcanzar la calle, de igual forma en las dos fugas ocurridas en menos de 24 horas.

 

Según el fiscal Jorge Sáenz, que investiga los sucesos, la modalidad es “demasiado sospechosa” porque se repitió dos veces, con lo cual concluyó que hay responsabilidades de funcionarios.