La senadora Dolores Padierna, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), señaló que las propuestas de reforma hacendaria y energética no entrarán en el periodo ordinario de sesiones del Congreso de la Unión que iniciará en febrero.
En conferencia de prensa indicó que lo anterior se desprende de una charla con el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, quien le comentó que dichas enmiendas serán presentadas hasta que hayan realizado cabildeos para lograr mayor consenso en torno a esos temas.
Padierna Luna aseveró que el gobierno federal pretende aplicar una política diferente, para lograr consensos entre los distintos sectores y contar con iniciativas que tenga el aval de la sociedad.
La legisladora adelantó que las autoridades federales aprovecharán el receso legislativo de mayo-septiembre para realizar cabildeos entre los distintos actores de la población y lograr el consenso necesario.
La perredista también se refirió a los acuerdos entre el Congreso estadunidense y la Casa Blanca, en torno el déficit fiscal de la Unión Americana y opinó que la economía del vecino país está en declive.
Expuso que prueba de esa situación es que en 2009 registró una caída de 3.5 por ciento, en 2011 presentó una baja menor y en 2012 una mejoría moderada, pero no suficiente para recuperar el empleo perdido.
La perredista alertó que las perspectivas económicas para 2013 no son muy alentadoras, ya que se tiene previsto que continuará el desempleo en la economía estadunidense, lo cual repercutirá en las remesas que envían trabajadores mexicanos a sus lugares de origen.
También se tiene considerada una debilidad en el sector manufacturero y una caída en el consumo personal; “la economía de Estados Unidos está viviendo el efecto W”, comentó.
A ello subrayó que se debe sumar que hay una desaceleración de la inversión privada de la Unión Americana, debido a la incertidumbre que genera la contratación de deuda, por la situación en Europa y el déficit en la balanza comercial.
Padierna Luna recordó que el Sistema de Reserva Federal (FED, por sus siglas en inglés) es la instancia que fija las tasas de interés de Estados Unidos, las cuales siempre están a la baja, lo que provoca que capitales de ese país busquen otros lugares más atractivos como es el caso de México.
Lo grave de todo ello, acotó Padierna Luna, es que son capitales “golondrinos” que en cualquier momento pueden huir del país.
Ante ello México tienen dos alternativas: la primera es “quedarse con los brazos cruzados” y esperar a que se recupere la economía estadunidense y “que jale a la mexicana”; la segunda sería la aplicación de medidas heterodoxas audaces, con el fin de cambiar el modelo económico a partir del fortalecimiento del mercado interno.
Otras opciones son generar inversión que detone la planta productiva nacional y buscar otros mercados, para atraer capitales foráneos y no apostarle a una sola opción.