La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano surge merced a las reformas a la administración pública aprobadas por el Congreso y difundidas el miércoles pasado en el Diario Oficial de la Federación.

 

Es la heredera de la Secretaría de la Reforma Agraria, pero ahora ha ampliado su alcance y transformado su visión.

 

Continuará velando por proteger al sector agrario; pero además coordinará -junto con autoridades estatales y municipales- el ordenamiento del territorio y los asentamientos humanos tanto regulares como irregulares, para promover un mejor desarrollo urbano.

 

La nueva dependencia impulsará políticas con jurisdicción en todo el país para el desarrollo de los estados. Con estas atribuciones se busca atender desde el gobierno federal un tema de infraestructura que ha evolucionado, y cuyos actuales retos no estaban, según el gobierno de Peña Nieto, debidamente atendidos con el anterior esquema de gobierno.

 

El decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación explica que una nueva responsabilidad de esta secretaría será “el desarrollo urbano con criterios uniformes respecto de la planeación, control y crecimiento con calidad de las ciudades y zonas metropolitanas del país, además de los centros de población en general, así como su respectiva infraestructura de comunicaciones y de servicios”.

 

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) indican que México es una sociedad primordialmente urbana: 78% de la población vive en ciudades.

 

El presidente Enrique Peña Nieto señaló que los propósitos de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano son: “La protección de los derechos agrarios que prevé el Artículo 27 de nuestra Constitución. La coordinación con las autoridades estatales y municipales, la planeación y el ordenamiento del territorio nacional y los asentamientos humanos, bajo criterios de desarrollo sustentable y la promoción de desarrollo urbano y metropolitano del país, a través de una mejor planeación habitacional, el desarrollo de vivienda y el aprovechamiento de las vocaciones productivas de las diversas regiones del país”.

 

La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano continuará trabajando las necesidades de la tierra y elaborará y ejecutará programas para satisfacer las necesidades de suelo urbano junto con la participación de los diversos grupos sociales que viven en nuestro país.

 

“La regularización de la propiedad agraria y sus diversas figuras que la ley respectiva reconoce en los ejidos, las parcelas, las tierras ejidales y comunales, la pequeña propiedad agrícola, ganadera y forestal, los terrenos baldíos y nacionales, y los terrenos que sean propiedad de asociaciones de usuarios y de otras figuras asociativas con fines productivos”, se lee.