La Guardia Nacional Costera de Estados Unidos informó que una plataforma petrolera de Shell se encuentra a la deriva y encallada en la costa de un islote del Golfo de Alaska, con el creciente riesgo de provocar un desastre ecológico.
La emergencia se inició el pasado 3o de diciembre cuando la plataforma Royal Dutch Shell Kulluk, que era transportada hacia la ciudad de Seattle para trabajos de mantenimiento, quedó a la deriva luego de que se rompieron los cables que la amarraban a un remolcador a causa de una tempestad en alta mar y se desplazó con unos 520 mil litros de diesel hasta la isla de Stikalidak , cerca del Parque Nacional de la isla Kodiak, en Alaska.
Pobladores, ecologistas y la comunidad internacional temen ante el peligro de un nuevo derrame al estilo devastador como fue el que en 2010 protagonizó Deepwater Horizon en el Golfo de México.
La Guardia Nacional Costera ha montando un dispositivo especial de emergencia para recuperar el control de la plataforma, pero hasta ahora no pudo intervenir a causa de la tempestad que asola el lugar. El portavoz de la Guardia Nacional Costera, Sam Sacco, afirmó que por ahora “no hay señales de pérdida de combustible” desde la plataforma.
Kulluk se soltó de una de sus líneas de remolque y encalló a las 21:00 hora de Alaska, en un sitio rocoso frente a la isla de Kodiak informaron fuentes gubernamentales. Los 18 miembros de la tripulación habían sido evacuados desde el sábado 29 por la guardia costera, debido al riesgo de tormenta.
Cuando la tormenta amaine y el clima lo permita, se tiene previsto que expertos marinos suban al Kulluk, tomen fotografías y videos, y presenten después un plan de salvamento más completo.