El Gobierno del Distrito Federal prometió que para cumplir con su plan de movilidad enfrentará a los liderazgos de transportistas, aun cuando tengan filiación con el PRD.
Rufino H. León, titular de la Secretaría de Transporte y Vialidad del Distrito Federal, advirtió que habrá “línea dura” para lograr la sustitución de 20 mil microbuses y las más de 10 mil unidades de taxis pirata.
Sin embargo, en el gobierno de Marcelo Ebrard se realizó la misma promesa y sólo se lograron regular tres mil de los 28 mil microbuses que circulan en la ciudad.
La Setravi fue encabezada en el sexenio de Ebrard por Armando Quintero, quien es líder de la corriente perredista Unidad y Renovación (Unyr), y uno de los factores que impidió avanzar en el proyecto, además de la falta de recursos, fue la confrontación con líderes transportistas que simpatizan con el PRD. “Habrá línea dura. No tengo compromiso con nadie, mucho menos con los líderes transportistas”.
En el DF existen 28 mil microbuses, y la ruta trazada por la Setravi es a partir de mayo comenzar la sustitución de 20 mil unidades.
No obstante, la autoridad definió que los choferes deberán comprender asociaciones para crear corredores de transporte concesionado y darles certeza jurídica a los propietarios de las unidades.
Rufino León advirtió también que habrá una regulación para abatir la percepción de corrupción que hay en la Setravi y los servicios que brinda como la entrega de placas.
Lo anterior, debido a que en el final de la gestión de Quintero se abrió una polémica al detectarse que presuntas camionetas de Televisa detenidas con dólares en Nicaragua obtuvieron placas de manera ilegal en la Ciudad de México.